Así de barato se come en un restaurante con Soles Repsol

Castilla y León es tierra de buen comer y mejor beber, como suele decirse por estos lares. Para muchos es la despensa de España y, además, puede presumir y de hecho lo hace de contar con algunos de los cocineros y chefs más importantes y reconocidos del país y también del mundo.

Muchos de estos restauradores cuentan con importantes reconocimientos en sus establecimientos ya sea en forma de Estrellas Michelín o de Soles Repsol, que acreditan la calidad de lo que allí se sirve, y se han convertido por ello en espacios gastronómicos de "obligada visita" para los amantes de la cocina de vanguardia que quieren probar cosas nuevas, además de un foco de atractivo turístico para el municipio, casi siempre del medio rural, en el que se ubican.

Esta Comunidad cuenta con hasta 58 establecimientos con al menos un Sol Repsol, de los cuales quince tienen hasta dos, como es el caso del restaurante burgalés Cobo Evolución, Run espacio gastronómico chic, con platos tradicionales que cuenta con mesa del chef y combina hormigón y madera, además de ofrecer un menú degustación por 129 euros denominado Humanidad, entre los que se incluye, entre otras, la carta de África donde se puede probar una sopa de vegetales y clorofila, Panna Cotta de almendras, escarcha de tomate especiado, ciruelas y albahaca, aves y sus interiores y un truchón de río, huevas, zanahoria, coco y cítricos, y donde destaca la aportación de Diego González, el mejor sumiller de España. En este emblema de la gastronomía burgalesa situado en la Plaza del Cordón se pueden disfrutar también de menús más económicos, como el semanal con entrantes de tradición y sugerencias de temporada por 45 euros, otro a la carta por entre 55 y 65 euros, y uno más con cocina de fusión, más informal, por 31 euros con un plato a elegir, postre y bebida y tres medias.

Otro de los restaurantes que sigue creciendo de la mano de su chef Cristóbal Muñoz es "Ambivium", ubicado dentro de la bodega Pago de Carraovejas en la localidad vallisoletana de Peñafiel, cuna de los vinos de la DO Ribera de Duero. En este palacio del buen comer y mejor beber -la bodega cuenta con una cava con más de 4.000 referencias de más de 20 países-. se puede disfrutar de un menú especial por 180 euros "sin armonías, ya que con ellas hay otras dos cartas que ascienden a los 360 y 430 euros, que hace un recorrido a través de los métodos de conservación que forman parte de las elaboraciones tradicionales de la gastronomía castellana, combinados con otros más innovadores desarrollados desde nuestro departamento de i+d+ I. Un homenaje al vino y la gastronomía.

Cellarium es el nombre del menú degustación del Restaurante Ambivium y hace un guiño al término latín clásico con el que se nombraba a la bodega o el lugar en el cual se almacenaban los vinos y los alimentos. Los platos del menú platos están basados en los métodos de conservación que forman parte indispensable de las elaboraciones tradicionales en la gastronomía. Los productos de temporada y de proximidad son quienes brillan en este menú íntimamente ligado a las técnicas heredadas de nuestros antepasados y a otras actuales.

Según apuntan desde el restaurante, Ambivium sigue apostando por el vino como hilo conductor a través de una cocina volcada en ofrecer el mejor bocado para cada copa. Legumbres, aves de caza, productos selectos de mar y de río… son algunos de los platos que los comensales se van a poder encontrar en la mesa. Una mesa en la cual la cuchara reclama protagonismo no solo en la versión salada, sino también en la dulce, y que cierra un menú con postres sorprendentes que van desde la parte más refrescante hasta la más golosa.

En Ávila, la chef Isidora Beotasy el equipo de El Almacén cuentan con losdos únicos Soles Repsol de la provincia. Son popularmente conocidos sus exquisitos

huevos fritos con carabineros, pero también y sobre todo el cochinillo confitado con frutos secos o el guiso de chipirones y langostinos picante, sin olvidar el solomillo al queso valdeón.

Y, en León, no hay que olvidar la Casa del Peregrino y su Cocinandos, con Yolanda León y Juanjo Pérez a la cabeza y sus platos sofisticados donde destacan sus carnes y pescados a la parrilla o sus versiones distintas de tomates de Mansilla de las Mulas, ya sea en dados aliñados, en un cóctel 'bloody mary' y en un pan con lengua de ternera curada. Todo un lujo para el paladar.

En tierras salmantinas, a mitad de camino de la Sierra de Francia y la capital charra, se encuentra Casa Pacheco, un mesón de ambiente taurino, donde el comensal no puede dejar de probar el espectacular tartar de salchichón con yema de huevo de campo o las lentejas pardinas con picadillo de chorizo y papada. También destaca en esta carta una croqueta cremosa de jamón ibérico vintage añada 2014, lomo de ciervo macerado en su propio juego, la merluza en salmuera y pilpil, la presa ibérica escabechada con cogollo de temporada y, de postres, un inigualable flan de crema de leche fresca y huevo. Un menú por entre 60 y 70 euros espectacular.

En definitiva, una Comunidad con mucho y bueno donde elegir para llenar la panza con alegría y disfrutar de una experiencia inolvidable.