Carriedo llama a las empresas a innovar y salir fuera para ser cada vez más competitivas

Castilla y León habrá concedido 323 millones de euros en ayudas directasa empresas para innovación, formación e investigación, a lo largo del periodo de aplicación de la RIS3 (Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente), que arrancó en 2021 y finaliza en 2027.

Así lo ha avanzado este jueves el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, durante la gala de entrega de los Premios Innovadores 2023, organizados por El Mundo de Castilla y León y celebrados en el edificio de Soluciones Empresariales de Arroyo de la Encomienda (Valladolid).

Allí, el consejero reafirmaba la apuesta por la innovación en la Comunidad que, según decía, tiene mucho que ver también con la capacidad de competir, y hacerlo a su vez con la capacidad de exportar y de internacionalizarse. En este sentido, el también portavoz de la Junta aseguraba que son retos que están muy unidos "y que en eso hay que trabajar”.

Tras destacar que Castilla y León cuenta con productos “muy competitivos " en los mercados internacionales y que ayudan a exportar mucho más de lo que se importa, aseguraba que la innovación es la “base” del crecimiento económico.

Además, destacaba que la Comunidad sigue liderando las exportaciones y crece en exportaciones por encima del 13 por ciento, y que esto se debe en gran parte al avance en materia de innovación, desde la Estrategia de Emprendimiento e Innovación y la RIS3, los Centros Tecnológicos para Transferencia del Conocimiento o la “apuesta” de la Junta por Wolaria, la aceleradora de empresas, que según Funcas “es la primera del conjunto nacional”.

Premios Innovadores 2023

Carriedo realizó estas declaraciones minutos antes de clausurar el acto de entrega de los Premios Innovadores 2023, al que también asistió el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, así como varios consejeros del Gobierno autonómico, como el de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, y el de Sanidad, Alejandro Vázquez.

Así, todos ellos apoyaron al creador del Instituto de Oftalmobiología Aplicada (IOBA), José Carlos Pastor, que recogió el galardón en la categoría de Personaje Único. El jurado valoró su capacidad para compaginar la labor investigadora con la docencia y la divulgación y destacó su papel en la propia creación y fundación del IOBA. Doctor en Medicina y Cirugía, está especializado en Oftalmología. Destaca su medio millar de artículos en revistas nacionales e internacionales y sus numerosos premios. Su nombre está vinculado a la vista y a investigar nuevas oportunidades para las personas que no pueden ver.

Igualmente, el jurado decidió por mayoría conceder el premio al Mejor Proyecto del suplemento Innovadores al grupo de investigación de Julia Almeida Parra, del Centro del Cáncer de Salamanca, por su trabajo enfocado en predecir “qué personas podrían desarrollar una leucemia linfática crónica, la más frecuente en los países occidentales”, y que afecta sobre todo a personas de edad avanzada. Su tasa de incidencia es de unos 5-7 casos por cada 100.000 habitantes y año, y su incidencia es mayo a medida que aumenta la edad.

Por su parte, el Premio Iberaval al Mejor Proyecto TIC fue para la empresa salmantina Arsoft, que ha diseñado una plataforma creada para que los profesionales sanitarios estudien las imágenes médicas, utilizando las tecnologías XR: realidad aumentada, realidad virtual y realidad mixta. NextMed, como se denomina, responde a una necesidad que el personal médico siempre ha tenido a la hora de enfrentarse a una operación: comprender a la perfección cómo son las estructuras anatómicas y los tejidos de sus pacientes para, de este modo, poder afrontar la intervención de la manera más precisa y segura posible.

La investigadora Alba GonzálezÁlvarez fue galardonada con el Premio CaixaBank Innovador Joven por dar vida a los huesos. Esta burgalesa es doctora en Ingeniería Biomédica y lleva casi nueve años desarrollando implantes y productos médicos para reconstrucciones muy complejas de diversas partes del cuerpo humano.

Por último, el Instituto de Procesos Sostenibles recibió el premio Iberdrola al Mejor Proyecto de Investigación Universitaria por dar una segunda vida a la poda de los bosques. En este contexto se enmarca el desarrollo de una plataforma biotecnológica para el aprovechamiento de los sobrantes de la poda de bosques o residuos agrícolas para la producción de compuestos químicos de alto valor agregado, en concreto ácidos carboxílicos de cadena media, como el ácido hexanoico y ácido octanoico.