Cinco pueblos medievales en Soria que te cautivarán

Acercarse a Soria es descubrir un inmenso y rico patrimonio artístico, acompañado por bellezas naturales. y a todo ello se une la tranquilidad y el sosiego de una tierra en calma, castigada por los embates de la despoblación, que no es por ello que deje de ser más interesante. Hoy nos acercamos hasta su provincia para introducirnos en cinco maravillas medievales que no hay que dejar pasar de visitar.

Nuestra primera parada es Almazán. Denominada como "El fortificado" por los árabes hispanos, todavía hoy conserva gran parte de las construcciones defensivas que convirtieron a esta localidad en un bastión estratégico en la Edad Media. Junto al Duero, y cercado por murallas y monumentales puertas, nos estamos adentrando en una de las localidades que contiene uno de los más ricos y relevantes conjuntos históricos de la Comunidad.

A lo largo de sus calles uno va descubriendo el monumental espacio intramuros, con casas señoriales, e iglesias como la de Nuestra Señora del Campanario y San Vicente, San Pedro y Santa María de Catalañazor o conventos como el de la Merced, donde reposan los restos del dramaturgo Tirso de Molina.

Siguiente parada, Calatañazor. Una auténtica villa medieval, donde destaca su castillo. Sus empinadas calles de trazado medieval y sus humildes casas fabricadas con entramado de madera de sabina, encestado de ramas con barro, adobe o en el mejor caso de ladrillo, configuran el aspecto medieval formando un conjunto armónico de gran belleza. Además de su casco urbano destaca su iglesia románica Ntra. Señora del Castillo. Y a las afueras del pueblo la ermita de la Soledad.

Llegamos hasta Rello. localizado en lo alto de una peña de roca caliza en los Altos de Barahona. Una villa medieval amurallada, con calles estrechas y empedradas donde uno no deja de admirar edificios señoriales. Todo un recinto declarado Bien de Interés Cultural y Conjunto Histórico. Una muralla rodea y protege a toda la villa, con diversas torres y almenas y en uno de los extremos se alza el castillo, del que se conserva aún hoy la torre del homenaje.

Entre sus bienes patrimoniales destaca la iglesia de Nuestra Señora de la Ansución y fuera del casco urbano se ubica la ermita de la Virgen de las Angustias. Merece la pena llegar hasta el mirador de la localidad para ver unas vistas espectaculares de la Hoz del río Escalote.

Llegamos a Berlanga de Duero, con uno de los castillos más espectaculares de la provincia. En esta localidad su primer alcalde fue El Cid. Pueblo medieval con palacio ducal, casas señoriales, conventos y una Plaza Mayor de arquitectura castellana, Tampoco hay que perderse la colegiata, ya de estilo más renacentista.

Y finalizamos nuestro recorrido por tierras sorianas llegando hasta El Burgo de Osma. Una de las localidades más pequeñas de España que cuenta con catedral. Cuenta con un gran recinto fortificado pero destaca sobre yodo su catedral, de origen románico para después pasar al gótico.

Merece la pena pasear por sus calles para llegar hasta la Plaza Mayor donde confluyen el Ayuntamiento y el antiguo Hospital de San Agustín. Pero es amplio y variado el patrimonio monumental de la villa soriana con la presencia de la Universidad de Santa Catalina, el seminario Diocesano de Santo Domingo de Guzmán, el Real Hospicio o la iglesia del Carmen, o el puente de factura medieval junto a la Iglesia de Santa Cristina,