Sanidad

El consejero de Sanidad se embarca en ‘Senda’, el proyecto de humanización del servicio de Medicina Nuclear del Hospital de Salamanca

La iniciativa, con un presupuesto de 130.000 euros, tiene como objetivo "crear un entorno confortable que mejore el bienestar de los pacientes durante la realización de las pruebas"

El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, inaugura ‘Senda’, el proyecto de humanización del Servicio de Medicina Nuclear del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca
El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, inaugura ‘Senda’, el proyecto de humanización del Servicio de Medicina Nuclear del Complejo Asistencial Universitario de SalamancaIcalIcal

El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, inauguró “Senda”, el proyecto de humanización del Servicio de Medicina Nuclear del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, durante su visita a la capital del Tormes donde inauguró el nuevo servicio de radiología del Centro de Atención Primaria San Juan y se interesó por el segundo PET-TAC del hospital, digital y de última generación, para diagnóstico por imagen molecular.

Este proyecto, cuyo nombre, por su definición, es “camino o medio para hacer o lograr algo”, busca “crear un entorno confortable que mejore el bienestar emocional de los pacientes durante la realización de sus pruebas diagnósticas, con el fin de que no se vean afectadas por el estrés”, según informó este martes el servicio de Comunicación del Causa. Senda cuenta con un presupuesto de más de 130.000 euros.

El montaje se ha centrado en una concepción de “diseño biofílico”, en un concepto utilizado en construcción y decoración para “aumentar la conectividad con el entorno natural” mediante el uso de la naturaleza directa, de naturaleza indirecta y modificando las condiciones del espacio y del lugar emulando la naturaleza, con grandes imágenes fotográficas, en vinilo, en base a parajes de la zona del valle del Tiétar, “poniendo en relieve la majestuosidad de la riqueza natural de Castilla y León y aunando praderas, bosques, montañas y ríos con el verdor y el agua como protagonistas”.

Además, el conjunto se ve complementado con musicalización en dos zonas de pruebas diagnósticas y en las salas de espera, con una pieza terapéutica, centrada también en armónicos sonidos naturales, como cantos de los pájaros, el agua corriendo o el viento, “estableciendo un ambiente más amable, más cercano”. Un paisaje sonoro capaz de evadir a los usuarios hacia esa naturaleza que están viendo y escuchando.

Redondea la propuesta un sistema de iluminación cambiante, que crea una “atmósfera inmersiva” en las estancias. Se ha diseñado una combinación de luces y sonidos que transforman los ambientes hospitalarios, “dulcificándolos”. Con todo ello se conforma un proyecto de humanización pionero en un servicio de Medicina Nuclear en Castilla y León, que combina la experiencia sensorial de imagen, luces y audios.

Tal y como pudo comprobar ayer el consejero, en la entrada del servicio, una cita de Miguel de Unamuno, un biófilo convencido, a modo de bienvenida, retiene todas las miradas: “Pocos sentimientos hay que procuren al hombre un mayor consuelo en sus penas, más descanso en sus trabajos, más calma en medio de las luchas por la vida y más serenidad para el ánimo que el sentimiento de la Naturaleza. Aspirando paisajes se goza de uno de los mayores placeres de la vida”.