Política

España exige volver a la dignidad y a la palabra

"Se agita otro prestige contra Galicia en el comienzo campaña"

Pedro Sánchez se ríe durante el pleno de investidura en el Congreso de los Diputados.
Pedro Sánchez se ríe Alberto R. Roldán La Razón

Estos últimos quince días no hay quien se los crea, al igual que los últimos cinco años.

El 22 de diciembre se reúne el jefe de gobierno en la Generalidad y Aragonés le dice que quiere referéndum. Este dice que no puede ser pero le dejan claro que tampoco se podían indultos o sediciones o malversaciones, amnistía etc… y cuando acaba la rueda de prensa se retira la bandera española. Viene una comisión parlamentaria europea a Cataluña y detectan el

Incumplimiento de la ley con el español y la presión insoportable a los padres que quieren que sus hijos estudien en español.

El presidente del Gobierno se permite decir que se va a reunir muchas veces con el delincuente de Waterloo.

El 26 Washington recibe con sorpresa el desaire de España por no querer ayudar en el Mar Rojo y no querer ir en contra de los huties.

El Rey defiende la constitución a ultranza y los socios del gobierno deprecian gravemente sus afirmaciones sin que el partido mayoritario del gobierno diga nada.

La Guardia Civil confirma que la organización Tsunami Democrátic está preparada para organizar nuevas revueltas si lo pide el prófugo con objeto de presionar al gobierno.

La destrucción de contratos fijos discontinuos se duplica en un año.

El 28 de diciembre se toma el ayuntamiento de Pamplona por parte del partido cuyo jefe es un terrorista con apoyo expreso del presidente del Gobierno, que a su vez vive voluntariamente del pacto ensangrentado con ellos. Los gritos de apoyo a todo ello, los mismos que se escuchaban en medio de la tragedia de los asesinatos.

3 de enero, la reforma del desempleo, reduce el incentivo para trabajar.

El 6, el Rey ensalza a las Fuerzas Armadas como garantes de la democracia y de la preservación de la identidad histórica de España. La ministra reclama nuevamente con contundencia a Israel alto el fuego.

El 9 el gobierno pide ayuda al PP para sus decretos tras exigir Junts retirarlos y negociarlos uno a uno.

Se agita otro “prestige” contra Galicia en el comienzo campaña.

Trabajo fuerza a CEOE a una subida del 4% o si no será mayor. la fiscalía pide al TC revisar condena por prevaricación contra Chaves y Griñan

Día 10, la sanidad de Ceuta y Melilla en huelga y es la única que gestiona directamente el ministerio de Sanidad.

El gobierno salva los decretos tras el chantaje exigido por el delincuente fugado y a su vicepresidenta le tumba el subsidio de desempleo su facción hermana del comunismo.

Cesiones que eliminan el artículo que era un compromiso obligado europeo para desembolsar diez mil

Millones en cuanto a la paralización de la amnistía y que días antes se incluía. También la cesión total de las competencias de inmigración o las exigencias ilegales para vuelta de empresas a Cataluña, o las subvenciones al transporte en Cataluña que pagaremos el resto de españoles.

He querido hacer un somero resumen de estas últimas dos semanas de auténtico esperpento y sometimiento a partidos con listas ensangrentadas, golpistas y otros cuyos dirigentes son prófugos de la justicia.

Esta auténtica locura no la comparte nadie, ninguna persona sensata, sea de las ideas que sean.

Un pacto perverso el que ha permitido aritméticamente acceder al gobierno a quien no tiene ningún principio ético ni democrático y eso es algo inimaginable en una democracia europea.

El clamor en España, el grito unánime, proveniente de cualquier sector e idea, es dignificar de una vez esta situación por irrespirable. Una huida hacia adelante tan alocada, tan imposible de entender y tan continuada es imposible.

España exige volver a una mínima seriedad y también exige justicia e igualdad para todos . Exige mínimo rigor, ética y volver a la palabra . Esa palabra mancillada y despreciada por un presidente de Gobierno que ha vaciado su credibilidad con su constante mal ejemplo y con su continuada mentira. Dimisión, ya que España ha de recuperar su dignidad.