Turismo

Este espectacular pueblo es el preferido de los madrileños

A menos de hora de la capital de España ofrece una rica y variada oferta cultural, medio ambiental y gastronómica

Iglesia de San Eutropio de la localidad segoviana de El Espinar
Iglesia de San Eutropio de la localidad segoviana de El EspinarDiputación de SegoviaDiputación de Segovia

Los madrileños son los ciudadanos que más viajen en busca de encontar el remanso de paz y de tarnquilidad que no tienen su ciudad. Muchos son los rincones a los que van, sobre todo de las provincias limítrofes, pero han encontrado su pueblo ideal. Muchos se creen que este municipio puede ser el segoviano de Pedraza, el abulense de Arévalo o Guadalajara, pero no es así, se encuentra en la provincia de Segovia, y cada vez es más atractivo para los madrileños, porque se encuentra a menos de una hora en coche y ofrece una rica y variada oferta cultural, medio ambiental y gastronómica.

Este espectacular pueblo no es otro que El Espinar, que cuenta con casi con 5.000 habitantes, pero que durante el fin de semana y el verano su publación se multiplica por bastante. La ocupación humana en el territorio del actual término municipal se retrotrae hasta época protohistórica tras el descubrimiento arqueológico de la ciudadela de Canto-Los Hierros. Un oppidum cuyas más de setenta hectáreas de dispersión de materiales, con casi un centenar de viviendas y varias líneas de muralla, y cuyo emplazamiento a más de 1700 metros sobre el nivel del mar, le sitúan, sin parangón en la historiografía peninsular, en el punto de mira de la investigación arqueológica a nivel europeo, según informa Wikipedia.

El vestigio más antiguo es una punta de lanza que se halló en pinarillo del Caloco. Esta punta de lanza está datada en el siglo ii y es de origen romano. Hay indicios de explotaciones mineras romanas en Caloco. Entre los siglos V y VIII, bajo la dominación visigótica, se conocía a la zona por el topónimo de Gudillos. La llegada de los árabes a la zona es conocida por diversos nombres: Albarrana, Moros, Guadarrama... Una vez reconquistada la zona por los cristianos en el siglo XI comienza la repoblación de la misma. Alfonso VI trae personas del norte de la península que se establecen en el área conquistada.

El Rey de Castilla, Enrique I, a comienzos del siglo XIII manda construir un palacio de caza en El Espinar ya que acostumbraba a realizar cacerías por la zona. El 8 de junio de 1297 se le concede a El Espinar la Carta Puebla, constituyéndolo como entidad independiente de la ciudad de Segovia dentro del Sexmo de El Espinar.

En 1317 se renovó la carta puebla que aumentaba los límites asignados al alfoz, confirmándola con su firma Alfonso XI en 1337. Más tarde, en 1368 se otorgó otra nueva carta puebla que aumentaba, de nuevo, los límites asignados.

La expansión de la reconquista hace que la seguridad de la zona aumente y que varias familias nobles se asienten en el municipio, levantando la Casa Palacio en Prados, La Losa, El Caloco y Santo Domingo. En 1626 las autoridades de El Espinar solicitan el título de villa para la población. No sería hasta 1639 que Felipe IV lo otorgaría.

Tras la Guerra de Sucesión y la implantación de los Borbones, se reactiva las actividades económicas haciendo hincapié en la explotación del ganado ovino. En este mismo siglo se cambia el histórico paso por el puerto de Fuenfría y el valle de Valsaín por el del paso del León, lo que hace de la villa terreno de paso y establece un importante cruce en la zona de San Rafael.

El siglo XIX fue un siglo de retroceso, en especial por los conflictos bélicos que sucedieron en el mismo. La Guerra de la Independencia provocó la pérdida de población y, posteriormente, cambió la explotación ganadera por el aprovechamiento forestal como motor económico de la villa. Los ataques de las tropas francesas a la villa produjeron pérdidas en varias obras de arte. Está documentado que Napoleón Bonaparte y sus tropas pasaron el 22 de diciembre de 1808 por el municipio y que hicieron noche en San Rafael.

El ferrocarril, que llegó en 1888, supuso un revolución para la economía de la villa de su estación, que quedaba alejada del núcleo principal. Debido a esto, nacería otro de los barrios que conforman el municipio. El avance de las comunicaciones que este medio representaba se vio rápidamente confirmado cuando en las inmediaciones de la estación se estableció la primera fábrica de tratamiento maderero en 1901.

El 2 de diciembre de 1914 el rey Alfonso XIII otorga el título de Muy Ilustre a la villa de El Espinar. Este título es otorgado por la petición de Domingo Rodríguez Arce y la intermediación del marqués de Nájera. Al aprovechamiento forestal y ganadero se une el turístico, basado este en la ubicación de la villa a pie de la sierra de Guadarrama. San Rafael se convierte en un pueblo vacacional, con la construcción de numerosas casas palaciegas, y esta situación se mantiene ante los grandes atractivos con los que cuenta.

Atractivos monumentales

- El Ayuntamiento: El Ayuntamiento de El Espinar fue reconstruido en 1941 tras el importante incendio que sufrió en Julio de 1936, y que destruyó una parte importante de su archivo. El edificio se sitúa en la plaza de la Constitución, lugar donde dialogan el granito labrado, el hierro fundido de los balcones, el encalado blanco y la teja de barro del ayuntamiento con los pinos, la fuente y las farolas, sintetizando el urbanismo más tradicional de El Espinar.

El Salón Consistorial o de Plenos está coronado por una estructura de madera de pino. En este salón se realizan los plenos, así como otros actos, que van desde la celebración de bodas, a la coronación de la Alcaldesa y sus Damas de Honor.

- Convento de Santa Isabel: Hacia 1575, un grupo de vecinas de El Espinar se comprometió a formar un Beaterio de terciarias Franciscanas o Isabelas para oír misa y orar juntas en forma de comunidad. Pero no será hasta 1604, cuando el Papa Pío V mande guardar clausura y ordenar el Convento de Santa Isabel. La historia de este convento está marcada por momentos de gran prosperidad económica, aunque el siglo XIX comienza su declive hasta desaparecer con la Desamortización en 1868.

El conjunto conventual incluía huertas, molinos, aposentos para las beatas, albergue para pobres y peregrinos, y una iglesia barroca construida a finales del siglo XVI. Esta iglesia contaba con un altar mayor plateresco, dos más pequeños en los brazos del crucero, coro, celdas y un bello escudo en su puerta principal que informaba de que allí se ofrecía cobijo para quien lo necesitara. Aún hoy, y pese a su estado de ruina, se conservan algunos restos de las yeserías de su cúpula del siglo XVIII y el sepulcro de los Condes de Alcolea.

- Ermita del Carmen: Situada en el paraje conocido como Arroyo Mayor, a los pies del Alto del León, en el kilómetro 61 de la carretera N-VI, esta ermita fue construida en 1915. Los planos los realizó un estudiante de arquitectura, Mario Palacios García (de la familia Palacios, propietarios de los hoteles Palacios en San Rafael) y están firmados por el arquitecto Arturo Villa. Fue consagrada por en 1918. Tiene un origen aristocrático, pues fueron los ilustres veraneantes y vecinos de San Rafael quienes recaudaron el dinero para su construcción. Entre ellos Clara Lengo, Duquesa de Bivona. Es una pequeña ermita edificada en sillares de piedra de granito y techumbre de teja a dos aguas que cuenta con un pequeño pórtico de entrada que cobija al visitante, según destaca la web del Ayuntamiento.

La portada está presidida por una espadaña y dos bolas de granito que pertenecieron probablemente a una iglesia de transición construida el en solar de la iglesia de las Damas Negras. El acceso a la ermita se realiza a través de un pequeño puente sobre el Arroyo Mayor. La ermita permanece normalmente cerrada salvo fechas especiales pero puede observarse su interior a través de una pequeña ventana.

- Fuentes: Es imposible concebir el municipio sin el verdor de sus pinos y sin el sonido del repiqueteo del agua. Repartidas por todo el municipio en formas diversas, algunas como simples manantiales, como pilones, abrevaderos e incluso dedicadas a personajes ilustres, ellas son parte importante de nuestro municipio. Aunque cada vez menos copiosas, las nevadas invernales y los pequeños arroyos hacen que las restricciones de agua sean menores que en otros municipios de provincias colindantes.

Hoy se pueden encontrar un buen número de fuentes decorando plazas como la fuente de Venancio Blanco; otras sirven para calmar la sed del viajero como las fuentecillas en la nacional VI o las de la carretera forestal. Como la lista podría ser interminable, cabe destacar que las fuentes son el tema de una de las más hermosas rutas de senderismo: Caminos de agua.

A través de la carretera forestal que une El Espinar con San Rafael, podrá realizar un paseo donde el agua es el protagonista. El camino es una ruta entre pinos, robles, multitud de helechos y algún que otro arce o acebo.

La primera fuente que se encuentra si se comienza el recorrido en El Espinar es la de Las Barrancas. Continuando el camino, en el lado izquierdo se podrá disfrutar del mirador natural con asientos de piedra desde donde se divisan el pueblo y el cerro del Caloco. La segunda fuente que se presenta en este camino es la llamada de Peña Morena, cuya agua es muy preciada en la zona. Siguiendo nuestro camino se encuentra la fuente de la Yedra y la fuente de la Virgen de las Nieves antes de terminar la carretera forestal.

En esta ruta se puede ver fluir el agua que siempre ha discurrido por nuestro municipio sin problemas, pero ha de hacernos reflexionar sobre la escasez de este bien imprescindible.

- Iglesia de San Eutropio: Templo de origen románico que cuenta con sucesivas reconstrucciones, alberga destacables elementos artísticos como un órgano barroco del siglo XVIII, de Pedro de Echevarría, la talla del santo titular y un retablo del siglo XVI atribuido a A. Sánchez Coello.

Las visitas guiadas son concertadas (grupos de mínimo 15 personas y dependiendo de disponibilidad). Acceso libre antes del horario de culto: Entrada gratuita y visitas guiadas a 3 euros destinados a la parroquia.

- La Corredera: La Plaza de la Corredera ha sido, a lo largo de los años, el lugar de reunión de niños y mayores y el mejor ejemplo de plaza de pueblo. Sus castaños de indias, plantados hacia finales del siglo XIX, son todos los días testigos del trasiego matutino de los que hacen la compra diaria monedero en mano, de los juegos y algarabía de los niños y de las charlas sin prisa de lo humano y lo divino.

Su nombre deriva del uso de esta plaza de correr y alancear toros, e incluso se celebraba en ella el baile del Teo, de donde nos llegó el apodo de “ahumaos” a todos los espinariegos. Hoy es escenario de verbenas, juegos, terrazas en verano y centro de reunión de los espinariegos.

Es una plaza grande, rectangular y rodeada de castaños y bancos de piedra. Su centro lo ocupa un quiosco de música diseñado por Santiago Jalvo Ruiz en 1954. Este quiosco es octogonal, con ocho columnas de hierro y cubierta de pizarra. En ella también se encuentra la escultura que el pueblo de El Espinar dedicó en 1990 a su banda de música que tantos buenos ratos nos ha ofrecido desde este quiosco.

- Plaza de Toros: La plaza de toros de El Espinar fue construida en 1948 bajo el proyecto de Luís Aranguren sobre el solar donde estaba situada la antigua plaza de toros. Pero no es hasta el 3 de Septiembre de 1949 que tuvo lugar su inauguración. Ese mismo día se lidiaron toros de la ganadería de Villagodio para los diestros: Luís Miguel Dominguín, Pepe Dominguín y Paquito Muñoz. La localidad más barata fue de 35 pesetas y la más cara de 150 pesetas.

Hoy en día, habitualmente el 15 de agosto, se celebra la corrida del Día de la Virgen, con las mejores figuras del escalafón.

Pero la plaza de toros no sólo es escenario de corridas de toros o novillos, sino también es el lugar de ensayo de la escuela de tauromaquia de El Espinar. En ella se celebra el “cine de verano”, el concierto de las Teas o el tradicional baile del Teo.

Atractivos naturales

El municipio presenta una gran diversidad de paisajes y ecosistemas, heredados de siglos de convivencia entre el hombre y el medio natural, dignos de ser conocidos y conservados.

Esta gran diversidad está formada por las grandes masas forestales de la Sierra de Guadarrama donde domina el pino silvestre; por prados, robledales de uso ganadero, encinares, bosques de ribera que crecen junto a los ríos y el impresionante pastizal de Campo Azálvaro.

Todos estos lugares se pueden disfrutar a través de una magnífica red de caminos y senderos entre los que destacan dos Cañadas Reales, dos Senderos de Gran Recorrido o dos etapas del Camino Natural Cañada Real Soriana Occidental, además de numerosos pequeños caminos con diferentes niveles de dificultad en los que, sin duda, podrás apreciar la belleza de este entorno privilegiado.

- La Panera: El área recreativa de “La Panera”, situada en el término municipal de El Espinar, a pocos kilómetros del núcleo de La Estación, es una zona perteneciente a la institución “Comunidad de Villa y Tierra de Segovia”, quien se ocupa de su gestión. Junto al río Moros, es un lugar habilitado para el recreo y esparcimiento del visitante, que cuenta con numerosos servicios y sin cobertura móvil.

Este magnífico entorno natural rodeado de pinos en plena Sierra de Guadarrama, cuenta con parking, barbacoas, un campo de fútbol de tierra, mesas y sillas de piedra o piscina entre otros servicios. La zona de casi 20 hectáreas. de superficie, recibe un buen número de visitantes los fines de semana y época estival.

- Parque de Aventuras en los árboles "DE PINO A PINO": En de Pino a Pino San Rafael, cada circuito está diseñado para ofrecer una experiencia emocionante y llena de aventuras. Tanto si eres un amante de la adrenalina como si buscas diversión, el visitante encontrará un desafío a su altura.

En el privilegiado entorno natural del parque Nacional de Guadarrama, el visitante se sumerge en la tranquilidad y la belleza del bosque. En cada circuito, puedes admirar la majestuosidad de los árboles que te rodean. Ya sea en familia o con amigos o como parte de una excursión escolar, en de Pino a Pino San Rafael el visitante encontrará una experiencia llena de diversión, risas y momentos inolvidables.

El equipo de monitores está presente en todo momento para garantizar su seguridad y aconsejarte para disfrutar al máximo de tu visita en el parque de aventura en los árboles de San Rafael.

- Complejo deportivo y de ocio Los Ángeles de San Rafael: Situado en el municipio de El Espinar, Vegas de Matute y Otero de Herreros, ofrece numerosas actividades deportivas y de ocio, además de dos hoteles, restaurantes, spa...

Deportes náuticos: en el entorno del embalse del Carrascal se concentra toda la actividad: Wakeboard Center - Escuela de Ski náutico, Piscinas, Motos de agua, canoas y kayaks, tobogán acuático, banana ski, etc.

Aventura: Cuenta con un circuito permanente de 4x4, puenting, tirolinas, rocódromo, pista americana, paintball, tiro con arco, etc.

Capital nacional del tenis

Además El Espinar es muy reconocido durante el verano al acoger los Internacionales de España “Villa de El Espinar” Open Castilla y León, que se celebra cada año entre la última semana de julio y la primera semana de agosto. El Torneo de El Espinar tiene su nacimiento a finales de la década de los setenta, y refleja la ilusión de su fundador, Pedro Ángel Muñoz Asenjo, por el deporte del tenis. A los 3 años de su nacimiento, ya fue considerado, por la RFET el mejor Torneo de España a nivel de Aficionados. El listón de inscripción llegó a superar en dicho año los doscientos jugadores, cifra récord en la historia del tenis español.

A los 5 años, es considerado el mejor Torneo Nacional, por delante de torneos con más antigüedad, participando 9 jugadores de entre los 100 primeros del mundo.

Por todo ello, se solicitó, junto con la RFET el PRIMER CHALLENGER de carácter Internacional y profesional, dotado con 25.000 dólares, como primer paso con el que ir practicando y aprendiendo para, en próximos años, alcanzar metas más ambiciosas y notorias.

El Torneo de Tenis "Villa de El Espinar" ha sido considerado en el año 2009 como “el mejor Challenger del mundo” entre los más de 162 Torneos de categoría (93 en Europa, 22 en América del Norte, 18 en Asia y 29 en América del Sur) que se disputan en 42 países de todo el mundo.

El torneo de El Espinar “Internacionales de España en Pista Rápida” es conocido internacionalmente, por ser un torneo donde, los jugadores que lo ganan, debido al tipo de pista y altitud de las mismas, alcanzan el éxito en el ranking mundial. Por aquí pasaron y ganaron Roger Federer, Rafael Nadal, Sergio Bruguera, Feliciano López, Fernando Verdasco, Martín Del Potro, Sergio Casal, Chela, Ygeni Kafelnicok, Pato Clavet, Pepo Clavet y Quino Muñoz, entre otros.

Gastronomía

Se basa en los platos típicos de la cocina tradicional castellana, platos abundantes, fuertes y ricos; cochinillo, rabo de toro, cordero, truchas de suss ríos de montaña, apetitosos postres como: leche frita, arroz con leche, bollos del Cristo. Hay que destacar por su interés gastronómico la época de recolección de setas, las jornadas gastronómicas de los Gabarreros y los concursos de tapas. Y los mejores restaurantes para disfrutarlos son:

- El Espino: Restaurante con muy buena atención,muy buena calidad en los alimentos y muy buena cantidad . Local donde se puede comer en pareja y reunirse una familia. Ofrece una gran variedad de excelentes platos recién preparados, con pescados y carnes de gran calidad.

- Restaurante Casa Mariano: La carta es bastante amplia, con productos de primera calidad y con unos precios muy asequibles.

- Bar Asociación San Antonio: Sitio acogedor de comida casera y atención personalizada. Sus precios están ajustados teniendo en cuenta a otros restaurantes de la zona, sus precios no son superiores a la media y su comida merece mucho la pena y además cuenta con un parque genial para los niños.