Alimentación

Experiencia entre sabores: Quesos TGT, Cocina Abierta de Karlos Arguiñano y la Bodega K5 crean una experiencia única entre quesos y vinos

El grupo quesero junto con la bodega presentan un maridaje perfecto

De izquierda a derecha: Antonio Sánchez, Brand Manager del Grupo TGT; Amaia Arguiñano, Gerente de la Bodega K5; Karlos Arguiñano
De izquierda a derecha: Antonio Sánchez, Brand Manager del Grupo TGT; Amaia Arguiñano, Gerente de la Bodega K5; Karlos ArguiñanoTGTTGT

Quesos TGT, principal productor y distribuidor de quesos del país, ha organizado una experiencia única en la Bodega K5 (Aia). Esta acción, se enmarca bajo la colaboración firmada entre TGT y Cocina Abierta de Karlos Arguiñano, a principios del año 2024, que culminaba con un acuerdo por dos años entre la marca de quesos y el programa de televisión, convirtiendo así a Karlos Arguiñano, en su embajador.

Quesos TGT: una historia de excelencia y tradición

Desde su fundación hace ya 60 años, Quesos TGT se ganó un lugar privilegiado en el corazón de los amantes del queso en todo el mundo. Con una dedicación inquebrantable a la calidad y la autenticidad, la marca cultivó una reputación por sus quesos artesanales elaborados con ingredientes de la más alta calidad y técnicas tradicionales.

La diferenciación de Quesos TGT radicaba en su compromiso con la excelencia en cada etapa del proceso de producción. Desde la selección cuidadosa de la materia prima hasta el cuidado artesanal en la elaboración y maduración de cada queso, cada producto lleva consigo el sello distintivo de calidad, convirtiendo a Quesos TGT en una marca de renombre internacional.

Su lema “Los quesos de mi vida” refleja el compromiso de la marca por estar presente en los momentos de la vida de sus consumidores, acompañándolos en experiencias gastronómicas con un queso para cada ocasión y para todos los paladares.

Para presentar la unión con el programa Cocina Abierta de Karlos Arguiñano, el grupo quesero ha querido crear una experiencia única a través de un viaje exclusivo a Zarautz, en el País Vasco. En él se han descubierto todos los entresijos de la Bodega K5, así como un maridaje creado únicamente para la ocasión y finalizando con una comida en el Hotel-Restaurante de Karlos Arguiñano.

La experiencia en la Bodega K5, Aia

Para celebrar esta asociación única, Quesos TGT y la Bodega K5 de Aia, invitaron a los amantes de la buena mesa a una experiencia gastronómica inolvidable en el corazón del País Vasco. La bodega, con una historia que se remonta al 2005, eran el lugar ideal para sumergirse en el mundo del vino y la gastronomía.

La experiencia comenzó con un recorrido exclusivo por las instalaciones de la Bodega K5, donde los invitados tuvieron la oportunidad de conocer de cerca el proceso de elaboración de txakolis Getariako Txakolina DO de la mano de expertos en enología. Desde la vendimia hasta la crianza en barrica, cada paso del proceso fue revelado, ofreciendo una visión única del arte vinícola.

Pese a que la primera añada del K5 fue tan solo en el año 2010, la bodega se ha convertido en un destino de referencia para los amantes del enoturismo. La finca se extiende a 30 hectáreas en total, de las cuales 15 hectáreas son de viñedo, compuesto únicamente por la variedad local Hondarrabi Zuri y 15 hectáreas de bosques y caminos que rodean la bodega, repleto de hayas, castaños y robles. Todo ello rodeado de la esencia del Cantábrico que se degusta en cada una de las botellas de Txakoli K5.

El maridaje perfecto

Después del recorrido, los invitados fueron llevados a una experiencia de maridaje en el interior de la Bodega K5 en la que se combinaron los quesos TGT con una cuidadosa selección de vinos K5. Cada maridaje fue cuidadosamente seleccionado para resaltar los sabores y texturas de los quesos TGT, proporcionando una experiencia sensorial única que deleitó a todos los asistentes.

El maridaje de Quesos TGT y la Bodega K5:

Los toques vegetales y cítricos de la variedad Hondarrabi Zuri hicieron que este K Pilota 2023 acompañara muy bien los quesos lácticos de corta maduración, Pazo Do Queixo DOP Tetilla de TGT, creado en el corazón de Galicia. Limpiaron boca, refrescaron y potenciaron la intensidad del queso por el refuerzo de acidez.

Vino K5 2021 con queso Belai Idiazábal DOP de TGT

Este delicado blanco K5 2021, un vino atlántico con volumen y toques salinos permitió disfrutar de los toques lácticos del queso sin llegar a saturar el paladar, acompañando a la perfección a un curado con una maduración mínima de 4 meses y de textura firme como es el queso Belai Idiazábal DOP de TGT, elaborado en Navarra.

Vino Kaiaren 2016 con queso Ronkari DOP de TGT

Un queso curado e intenso de leche cruda de oveja como es el Ronkari DOP, elaborado en el Valle del Roncal, contrastó muy bien con la crianza de las lías del vino Kaiaren 2016 y su posterior envejecimiento en botella. Un vino fresco, pero con cuerpo y mucha complejidad al mismo tiempo. A su paso por boca se siente equilibrado, oleoso y fresco.

Vino K5 2014 con queso Tío Resti Cabra Fresco de TGT

Tío Resti Cabra Fresco de TGT, un queso suave, agradable fino y muy nutritivo, ensambló muy bien con los toques de levadura, tostados y bollería que tiene el vino K5 2014. Una fusión que transmitió elegancia y sutilidad.

Vino K5 Vendimia Tardía con queso Roncari Blue Oveja de TGT

Al probar el K5 Vendimia Tardía junto a un queso azul como el Roncari Blue Oveja de TGT, se contrastó el dulzor con la salinidad y el ligero toque picante que tienen este tipo de quesos. Una combinación umami en el paladar.

Menú a medida

Después del maridaje, los invitados disfrutaron de un exquisito menú especialmente diseñado para la ocasión en el Hotel-Restaurante Karlos Arguiñano, ubicado en pleno centro de Zarautz.

Este icónico hotel-restaurante, fundado por el célebre chef Karlos Arguiñano, es conocido por su cocina vasca de alta calidad y su ambiente acogedor. Con una decoración que refleja la rica historia y cultura de la región, el restaurante ofrece una experiencia gastronómica auténtica que combina la tradición culinaria con la innovación.

Finalizando esta experiencia única con el mar Cantábrico de paisaje, el recuerdo de los Quesos TGT y los vinos de la Bodega K5, evidencian la unión entre territorio y gastronomía. Se fusionan ofreciendo la mejor experiencia gastronómica de autor para todos aquellos amantes del queso.