Curiosidades

El imponente castillo donde se puede comer a cuerpo de rey

Se puede disfrutar de un menú espectacular por 21 euros, hacer una visita guiada y aprender más de los señores y vasallos, de la vida cotidiana o las armas de caza y de guerra en el Centro de Interpretación del Medievo que hay en su interior

Imagen de Montemayor del Río con su imponente castillo al fondo
Imagen de Montemayor del Río con su imponente castillo al fondoJesús FormigoIcal

Castilla y León puede presumir y, de hecho lo hace, de contar con un amplio, variado y espectacular patrimonio histórico y monumental, entre catedrales, iglesias, ermitas, casonas medievales, palacios y, cómo no, castillos, bastiones en su mayoría construidos en el medievo para defender a la población de los ataques de los moros que querían someter la Península Ibérica.

Son numerosas las fortalezas las que hay a lo largo y ancho o alto de la Comunidad, la gran mayoría en buen estado de conservación y visitables, como es el caso de la del municipio vallisoletano de Peñafiel, en plan ribera del Duero, que acaba de sufrir una remodelación de la barbacana permitiendo ahora una visita integral del castillo, en cuyo interior, además, se encuentra el Museo Provincial del Vino.

Pero en estas líneas este periódico quiere hacer mención a otro castillo que también ha sido rehabilitado no hace mucho y cuyas estancias se pueden visitar de forma guiada y que está considerado como uno de los más bonitos de España.

Además, y como curiosidad, cuenta con una magnífico restaurante en su interior con una cocina de calidad y vanguardia sin perder la tradición y que apuesta por los productos de la tierra, que no deja indiferente a nadie y que permite al comensal comer a cuerpo de rey desde 21 euros por persona si se trata del menú castillo, que incluye aperitivo, entrante, y un segundo plato a elegir entre una carne o pescado, además de un pre-postre y un postre.

Si bien, este comedor dispone también de un menú degustación con siete platos que cuesta 40 euros por persona, bajo reserva anticipada, dirigido a todos aquellos que tengan un amplio paladar con ganas de disfrutar y dejarse sorprender por nuestra cocina, según apuntan en su web.

Se trata del castillo de San Vicente que se ubica en la localidad salmantina de Montemayor del Río, en plena sierra de Béjar, en un monte escondido en un valle que hace frontera con la provincia de Cáceres, en Extremadura.

Una fortaleza que se caracteriza por sus altos muros y torres cilíndricas y cuadradas que le dan una esbeltez y un poderío sin igual. Destaca especialmente la torre del Homenaje. En su interior, denominado El Cortinar, se encuentran la parroquia y casas anejas.

Su origen parece remontarse al siglo XIII con el Sancho I de Portugal como dueño y señor, al que siguió su hijo Alfonso" El Gordo". El conjunto actual parece haber sido construido en los siglos XIV y XV, probablemente por el infante don Pedro, o por su hijo don Sancho. Fue propiedad de la familia real hasta el año 1458, cuando fue donado por el príncipe Enrique (futuro Enrique IV) a Juan de Silva.

La puerta, en ángulo dentro de una torre, tiene dos arcos, uno agudo y otro escarzano, con una garita encima. las ventanas son adinteladas, habiendo perdido varias de ellas la decoración que tenían al exterior, mientras que las almenas están provistas de troneras redondas y saeteras.

Tuvo una función defensiva del paso natural entre la meseta norte y Extremadura y fue testigo de intercambios de gentes y mercancías, paso de rebaños trashumantes de la Mesta y de peregrinos camino a Santiago. De hecho, cabe destacar, que por este municipio, allá por el siglo XVI, pasaban más de 200.000 ovejas pertenecientes a la Mesta, cuyo control se llevaba por el señor del Castillo.

El castillo ha sufrido un proceso de restauración y consolidación, y hoy en día alberga el Centro de Interpretación del Medievo, donde el visitante podrá conocer los entresijos de la fortaleza y empaparse de todos los aspectos relacionados con las fortificaciones y las técnicas de construcción medieval, así como la repoblación del Sur de Salamanca, la evolución del castillo y la vida en el interior de esta fortaleza.

Una visita obligada en la que el ávido turista puede aprender más de los señores y sus vasallos, de su vida cotidiana, de las armas de caza y de guerra, o de los roles e indumentarias de los hombres y mujeres medievales.

Además, cabe señalar que el recorrido ofrece un paseo precioso por los distintos elementos constructivos de la fortaleza, desde el foso hasta la barbacana, pasando por la inigualable torre del homenaje o el paseo de ronda.

Si bien, el castillo no puede visitarse de manera libre ya que solo puede hacerse de forma guiada, que pueden realizarse de martes a domingo por la mañana a las 11:30, 13,00 y 17,00 los sábados, domingos y festivos. De hecho, tras unos días cerrado por vacaciones, las visitas a la fortaleza se retoman este sábado.

El precio es de cuatro euros para Adultos y tres euros para menores de 10 años y mayores de 65 años. La adquisición de las entradas se realizará en la taquilla ubicada en el interior del castillo en el horario marcado. La duración de cada pase es de un hora.

Imagen del castillo de Montemayor del Río
Imagen del castillo de Montemayor del RíoJesús FormigoIcal

Arquitectura popular

Pero Montemayor del Río tiene mucho más que ofrecer al turista que el castillo. Destaca su arquitectura popular, que invita a un paseo relajado por sus calles y plazas, así como la iglesia parroquial y la plaza Mayor, el ágora de la villa.

También son reseñables sus edificios civiles como la casa del Concejo, la lonja o la portada de la alhóndiga, sin olvidar el Rollo y lo que queda del antiguo Hospital.

La Casa de La Puente, el crucero de San Antonio, la ermita del Santo y, sobre todo, el Puente de Piedra bien merecen una visita a este municipio salmantino.