Incendios

El incendio de Porto (Zamora), sin desalojados tras regresar los vecinos de Ribadelago

Se mantiene la prohibición de bañarse en el Lago de Sanabria con el fin de facilitar la labor de recogida de agua de los medios de extinción aéreos

Vista aérea del lago y un pueblo de la comarca de Sanabria
Vista aérea del lago y un pueblo de la comarca de SanabriaPaloma V. EscarpaEuropa Press

El Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) constituido por los incendios de Zamora ha acordado este sábado por la mañana la vuelta a sus casas de los vecinos de Ribadelago Viejo y Ribadelagado Nuevo, por lo que ya no hay ningún pueblo desalojado por el incendio de Porto, el que más preocupa en esta provincia.

Con el regreso de los habitantes y veraneantes de esas dos poblaciones situadas a orillas del Lago de Sanabria han vuelto ya a sus casas los vecinos de todas las poblaciones evacuadas, un total de catorce desde que el incendio se declarara el pasado 14 de agosto a causa del rayo de una tormenta, según ha informado el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Fernando Prada.

Las últimas poblaciones en volver a sus casas, que fueron desalojadas el pasado martes, suman una población censada de 104 personas, aunque el número real de vecinos en estas fechas es mucho mayor por la llegada de veraneantes y descendientes de estas poblaciones.

De los evacuados, la mayoría se acomodaron por su cuenta en segundas residencias, casas de familiares o alojamientos hosteleros y catorce utilizaron los alojamientos colectivos habilitados en Benavente, ocho el albergue instalado en el Centro de Negocios por Cruz Roja y seis la residencia de personas mayores pública Los Valles.

El Cecopi también ha acordado levantar la restricción de circulación por las carreteras de acceso al Lago de Sanabria, la ZA-103 y ZA-104, si bien en la primera de ellas está prohibida la circulación desde San Martín de Castañeda a la Laguna de los Peces.

Además, se mantiene la prohibición de bañarse en el Lago de Sanabria con el fin de facilitar la labor de recogida de agua de los medios de extinción aéreos.