La inteligencia artificial se abre paso en Castilla y León al servicio de la salud

Castilla y León apuesta por las bondades que ofrece la Inteligencia Artificial (IA) para mejorar la salud de los ciudadanos. Y es que la Consejería de Sanidad ha alcanzado un acuerdo de colaboración con al Instituto de Investigación Biomédica (Ibsal) y la empresa Novartis que estará vigente hasta 2026 con posibilidad de ser prorrogado y ampliado a otros centros de la Comunidad, para desarrollar un novedoso y pionero sistema de detección precoz de dislipemias, que es la alteración del nivel de lípidos en sangre, especialmente colesterol y triglicéridos, que permitirá mejorar la prevención de enfermedades cardio y cerebrovasculares.

De hecho, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2020 perdieron la vida en Castilla y León un total de 8.264 personas por patologías del sistema cardiovascular, que es la segunda causa de muerte en España. Concretamente, el 28 por ciento de muertes en la Comunidad es por esta causa, sobre todo del rango del infarto agudo de miocardio o el accidente cerebrovascular.

«El control lipídico es una prioridad en nuestras políticas sanitarias», decía el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, tras firmar este acuerdo, que permitirá ese control mediante el desarrollo de una herramienta que dará a los profesionales sanitarios, tanto de Atención Especializada como de Atención Primaria, la información necesaria para poder actuar.

En concreto, los profesionales utilizarán un programa que, a partir de unos biomarcadores que utiliza la Inteligencia Artificial, simulará el razonamiento y emitirá recomendaciones específicas. «De esta manera -explicaba Vázquez- se facilita al médico de forma precoz la información y las alertas con el fin de mejorar la asistencia en pacientes con dislipemias para conseguir que se reduzca el riesgo de eventos cardio y cerebrovasculares».

El consejero destacaba también que, como novedad, este sistema permitirá a los médicos dar las mejores medidas y recomendaciones en cada momento, tanto terapéuticas como de prevención, mediante una serie de consejos o de avisos realizados por inteligencia artificial. «Con este sistema podremos llegar a toda la sociedad, y en primer lugar, a aquellos pacientes con factores de riesgo que ya han sufrido un evento», aseguraba el consejero.

Implantación progresiva

Vázquez explicaba que el objetivo que se han marcado en la Consejería pasa por reducir la mortalidad en al menos medio millar de pacientes durante los tres primeros años así como evitar 1500 efectos adversos graves, como pueden ser infartos o ictus cerebrales, y alrededor de dos mil hospitalizaciones.

El consejero apuntaba también que este sistema se implantará de manera progresiva para poderlo hacer como prevención primaria y actuar de forma directa en 600.000 castellanos y leoneses que tienen en estos momentos problemas en su metabolismo lipídico.

Tranquilidad ante el repunte de la covid

Por otro lado, el consejero llamaba a la tranquilidad ante la preocupación social existente en la Comunidad debido al repunte de la covid en las últimas semanas, que ha obligado incluso a tener que usarse nuevamente la mascarilla en algunos centros de salud y áreas concretas de hospitales de Castilla y León. El consejero aseguraba que aunque hay un mayor número de pacientes ingresados tanto en las UCI como en planta, estos no se corresponden con el aumento epidemiológico y, además, la circulación del virus ya ha empezado a disminuir.

Y respecto a los dos celadores encerrados en el centro de salud de Astorga que exigen que se les abone las retribuciones de las noches y los festivos realizadas en jornadas ordinarias de 17 o 24 horas y han asegurado que hasta que no sean recibidos por el consejero de Sanidad no saldrán de su encierro, Vázquez aseguraba que las peticiones de ambos celadores están "suficientemente garantizadas” en el acuerdo con los sindicatos.