La lluvia y el viento no desluce la llegada de los Reyes Magos a Castilla y León

La ilusión y alegría que volvieron a llevar los Reyes Magos a todos los rincones de Castilla y León no pudo ser deslucida por el temporal de lluvia y viento que fue protagonista en las numerosas cabalgatas que se llevaron a cabo en los pueblos y ciudades de la comunidad.

Melchor, Gaspar y Baltasar hicieron las delicias, un año más, de pequeños, y no tanto pequeños, de Castilla y León, que volvieron a disfrutar con Sus Majestades, quienes, junto a sus pajes tuvieron una larga jornada, que concluyó con la entrega de juguetes y regalos en las casas.

El trabajo arrancó a primera hora con la visita a diferentes hospitales para alegrar las caras de quienes están pasando malos momentos de salud en estos momentos, y no pueden recibir sus regalos en los hogares. Por ejemplo la magia y la alegría inundaron los pasillos del primer centro sanitario del Bierzo y Laciana, sorprendiendo tanto a los niños ingresados en el Servicio de Pediatría como a los mayores ubicados en las demás plantas del centro sanitario ponferradino.

Por otra parte, los Reyes Magos y toda su comitiva llegaron a la estación de Adif de León a bordo de un tren de la serie 449 fletado especialmente para la ocasión. Numerosos niños acompañados de padres y abuelos acudieron a recibir a sus majestades, al igual que el alcalde, José Antonio Diez, que esperó a Melchor, Gaspar y Baltasar a pie de andén.

Tras saludar a los pequeños, que no ocultaban su emoción, montaron el tren turístico para acercarse a la Plaza de San Marcelo, en cuya sede consistorial tuvo lugar una recepción oficial.

Dónde no pudo ser la alegría completa, fue en Salamanca, ya que la previsión de lluvia obligó a suspender el tradicional saludo de los Reyes Magos desde el balcón del Ayuntamiento.

Aunque Melchor, Gaspar y Baltasar, junto a una comitiva formada por más de 500 personas, con once carrozas, ocho espectáculos de animación, repartieron más de 7.000 kilos de caramelos, magia e ilusión.

Trabajo y proyecto de vida

Por su parte, el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, pidió a los Reyes Magos «trabajo para todos los vallisoletanos y que los jóvenes puedan desarrollar su proyecto de vida aquí», así como «paz en cualquier lugar del mundo”» en los prolegómenos de una cabalgata que, pese a las inclemencias del tiempo, pudo salir a las calles de Valladolid, pasadas las 18.30 horas de la tarde, para cubrir de luz y caramelos la ilusión de los niños y niñas de la ciudad.

Asimismo, solicitó a Sus Majestades de Oriente «que el talento vallisoletano se quede en Valladolid a través de la creación de empresas y de las grandes compañías que tenemos en el sector de la automoción, de la industria agroalimentaria y del sector servicios». Sobre la Cabalgata, Carnero la consideró como «uno de los días fundamentales de la Navidad».