Política

Mañueco coloca a Tudanca «en la orilla de la indignidad» por apoyar a Sánchez

El presidente de la Junta «entiende» el malestar de la gente que protesta en la calle contra la amnistía pero rechaza hostigar al adversario político: «Sé de lo que hablo, lo he sufrido»

Mañueco interviene desde su escaño en el Pleno de esta tarde
Mañueco interviene desde su escaño en el Pleno de esta tardeRubén CachoIcal

Las protestas ciudadanas ante las sedes del PSOE en contra de la amnistía y por la igualdad entre españoles, que los socialistas ven como ataques impulsados principalmente desde Vox y han pedido su condena, protagonizaba la sesión de control a la Junta en las Cortes a pesar de que no estaba en ninguna pregunta del orden del día.

Lo hacía ya desde el inicio cuando el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, pedía a los procuradores de Vox que se levantaron de sus escaños para mostrar unos carteles en los que se podía leer «Sí al Estado de Derecho» y «No a la amnistía» que se sentaran y que retiraran los carteles.

Y continuaba durante el cara a cara entre el presidente de la Comunidad, Alfonso Fernández Mañueco y el portavoz del PSOE, Luis Tudanca, con el tema migratorio como telón de fondo.

El socialista pedía a Mañueco que condenara estos «ataques» a las sedes del PSOE, que consideraba «asaltos a la democracia» y echaba en cara que en ellos estuvieran presentes desde Esperanza Aguirre hasta Santiago Abascal o García-Gallardo. «Ni siquiera Trump se atrevió a tanto», decía Tudanca, para quien Mañueco es un «rehén» de Vox y le pedía que condenara rotundamente estos «ataques».

El jefe del Ejecutivo autonómico, lejos de amilanarse, aseguraba que tal y como está la situación política nacional «entiende» que la gente salga a la calle a protestar contra la amnistía, si bien dejaba claro que rechaza cualquier hostigamiento hacia un adversario político. «Sé de lo que hablo, porque lo he sufrido», apuntaba.

Pero dicho esto, Mañueco se lanzaba a la yugular del líder socialista para recordarle que él, como presidente de la Junta, es quien dirige los designios de Castilla y León, cosa que no ocurre con el Gobierno de Sánchez, cuya dirección se encuentra en Waterloo con Puigdemont al frente. Y al hilo de esto, el líder popular echaba en cara al PSOE estén ocupados con acuerdos «infames»para «atornillar» a Sánchez en La Moncloa, y que esa es una de las cuestiones que esté provocando problemas como la crisis migratoria.

Mañueco, en tromba, denunciaba que los socialistas estén utilizando a los migrantes «para tapar las vergüenzas» de la amnistía y la condonación de la deuda a Cataluña, y aseguraba que el PSOE está en un «mercado de votos a cambio de privilegios y perdón a los delincuentes» que, en su opinión, es una «estafa» para España de la que los socialistas, en general, y los de Castilla y León, en particular, son «cómplices».

Y sobre lo que dijo Tudanca de la amnistía de que cuando llegara ese río ya cruzaría el puente, Mañueco le recordaba que ese río ya está aquí, y que ha decidido cruzarlo. «Se ha situado al lado de Sánchez en la orilla de la indignidad», le espetaba.

Frente a ello, y tras advertir que la igualdad, solidaridad y unidad de España está en riesgo, el presidente de la Junta aseguraba con vehemencia que Castilla y León no se callará y defenderá con firmeza y determinación los valores democráticos.

Las malas formas de la oposición

Aunque no por esperado deja de ser noticia, debido a la tensión política existente, las malas formas se han vuelto a apoderar de las sesiones plenarias, sobre todo en la oposición, que dedicó buena parte de sus intervenciones de esta tarde para insultar a la Junta y a PP y Vox.

Mañueco tuvo que escuchar en el hemiciclo en boca del socialista Tudanca que preside un «Gobierno racista que odia a las personas», mientras que Ana Sánchez, también del PSOE, llamaba facha al Ejecutivo regional.

El culmen llegó con Pablo Fernández, portavoz de Unidas Podemos, que fue llamado al orden por llamar a Mañueco «miserable, fascista, racista y xenófobo», término este último que el liberal FranciscoIgea, del Grupo Mixto, usó para definir a Juan García-Gallardo.