28-M

El mapa municipal de Castilla y León se tiñe de color azul

El PP podrá recuperar bastiones importantes como Valladolid, Segovia, Burgos y Palencia mientras que Soria sigue siendo del PSOE al igual que León, pero con el apoyo leonesista

Mazarías, De Vicente, Vázquez, Bravo y Paloma Sanz celebran la victoria en Segovia
Mazarías, De Vicente, Vázquez, Bravo y Paloma Sanz celebran la victoria en Segovianacho ValverdeIcal

Emocionante jornada electoral la que se ha vivido este domingo en Castilla y León, en la que el Partido Popular ha vuelto a ganar las elecciones municipales. Pero no solo ha sido el partido más votado, demostrando su fortaleza municipal, sino que, además, va a recuperar bastiones importantes perdidos.

Es el caso sobre todo de Valladolid, aunque para ello deberá pactar con Vox, pero también Segovia, que tras veinte años de gobiernos socialistas vuelve a manos del PP con José Mazarías, que suma más votos que toda la izquierda junta y gobernará a buen seguro con el apoyo de la concejal de Ciudadanos.

Igualmente, los populares recuperan el bastón de mando en Burgos, ciudad perdida hace cuatro años a manos del PSOE de Daniel de la Rosa, que aunque ha ganado las elecciones le han faltado dos concejales para conseguir la mayoría, a la que sí llegaría el presumible pacto entre PP y Vox que dará el Gobierno municipal a la popular Cristina Ayala.

La tercera capital de provincia que podría regresar a manos del PP es Palencia, si bien, para ello tendría que formarse un tripartito, con los populares, que logran ocho ediles, más los tres de Vox y los tres de Vamos Palencia, la gran sorpresa del día, que tiene la llave de gobierno ya que podría darle el bastón de mando al PSOE.

Los socialistas, como se preveía, pierden buena parte del poder municipal que lograron hace cuatro años, si bien mantienen Soria, su gran feudo con Carlos Martínez, que ha logrado una nueva mayoría absoluta. Además, podrán mantener León, ciudad en la que vencen pero necesitarán del apoyo de la Unión del Pueblo Leonés (UPL) que logra cinco concejales en el mejor resultado de su historia.

Otra de las capitales de provincia que retiene a su alcalde en la pasada legislatura es Por Ávila, que seguirá gobernando la capital amurallada de la mano de Jesús Manuel Sánchez Cabrera, que seguramente podrá hacerlo en minoría ya que la suma de PP y Vox no da. De hecho, solo podría desbancar a Cabrera un tripartito con el PSOE que suena utópico.

El presidente de la Junta y del PP, Alfonso Fernández Mañueco, reivindicaba, exultante, el triunfo popular en la Comunidad. «Hemos ganado las elecciones en España y en Castilla y León», decía, mientras aseguraba que empieza la cuenta atrás para desalojar a Sánchez de La Moncloa, y que Castilla y León ya ha hecho sus deberes en este cometido.

Además, los populares gobernarán con mayoría absoluta en siete de las nueve diputaciones provinciales, todas menos León y Soria, mientras que, además, el PP consiguió la victoria en los principales ayuntamientos de Castilla y León de más de 5.000 habitantes. De hecho, en 34 de los 60 que se contabilizan -más de la mitad- aunque están supeditados una docena a los pactos con Vox.

Acude a votar con un loro

La jornada electoral transcurría con normalidad y sin incidentes, aunque no faltaron las anécdotas habituales de este día en forma de excentricidades, despistes u olvidos. En Palencia un hombre acudía a votar al Centro Social Fernández Nieto con un loro de gran tamaño ante la sorpresa de todos, y en ese colegio no se presentó ninguno de los titulares de una mesa.

En Valladolid, al socialista Óscar Puente se le olvidó el DNI y tuvo que esperar a que se lo trajera para poder votar, mientras que en el pequeño municipio zamorano de Moreruela de Tábara «se colaba» el voto de una persona que no está censada. También hubo un hecho trágico, ya que un hombre de 96 años perdía la vida de un infarto nada más salir de votar en un colegio de Palencia.