Las oficinas del Sepe se convierten también en puntos violeta frente a la violencia machista

Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, el Gobierno de España está avanzando en la puesta en marcha de los denominados como puntos violeta para ayudar a mujeres víctimas de violencia de género.

Un servicio que se va a implantar en las próximas semanas en todas las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal de Castilla y León (Sepe), y que ayer lunes se inauguraba en Zamora, con la presencia del delegado del Gobierno en la Comunidad, Nicanor Sen.

Así, las 63 oficinas del Sepe se convertirán en "espacios seguros" para las mujeres víctimas de violencia machista, para lo cual se formará a los dos centenares de empleados que suman estas oficinas, que a partir de ahora contarán con el distintivo de los puntos violeta y un código QR desde el que se da acceso a los teléfonos de atención sobre violencia de género y los recursos disponibles.

“Es un compromiso de la sociedad", destacaba Sen, para quien esta lucha solo puede conseguir su fin con el compromiso de todos, administraciones y ciudadanos, a nivel nacional y con la colaboración de los organismos y las instituciones.

Con esta iniciativa el Sepe se suma también a la lucha contra la violencia de género, con la que se pretende también lograr la máxima coordinación entre los distintos organismos e instituciones en esa materia.

Renta activa de inserción

El delegado del Gobierno se refería también a la Renta Activa de Inserción, una ayuda que ofrece el SEPE a través del Ministerio de Trabajo y a la que pueden acceder las personas en situación de desempleo que no tienen derecho a la prestación contributiva ni al subsidio de desempleo.

La cuantía de esa ayuda es de 480 euros mensuales y a ella pueden acceder, entre otras personas, las mujeres víctimas de violencia machista que estén desempleadas.

En Castilla y León hay 4.099 mujeres incluidas actualmente en ese sistema de protección de las víctimas, 1.055 son perceptoras de la prestación, lo que supone una cuarta parte de las víctimas con casos activos en el sistema VioGen,

Valladolid, con 220, León (198) y Burgos (193) son las provincias con más mujeres que han sufrido la violencia machista que cobran la Renta Activa de Inserción, seguidas de Salamanca (99), Ávila (87), Palencia (81), Zamora (71), Segovia (65) y Soria (41).

“Son unas ayudas que las víctimas tienen para incorporarse nuevamente al mercado laboral y que son muy importantes para ellas”, destacaba Nicanor Sen, quien invitaba a seguir trabajando a través de la red de administraciones y de organismos del Gobierno de España en Castilla y León “para intentar, entre todos, eliminar esta lacra y esta mancha que sacude, desgraciadamente, a nuestra sociedad”.