Turismo

Paradores invertirá más de 3,4 millones de euros en su establecimiento de Tordesillas

Las nuevas instalaciones conllevarán un importante ahorro energético y económico

La presidenta de Paradores, Raquel Sánchez, junto con el delegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales
La presidenta de Paradores, Raquel Sánchez, junto con el delegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto CanalesMiriam Chacón/Ical

La empresa pública Paradores de Turismo invertirá algo más de 3,4 millones de euros en su establecimiento de Tordesillas. Así lo ha detallado hoy su presidenta, Raquel Sánchez, durante una visita realizada a las instalaciones hoteleras de la localidad castellano y leonesa en compañía del subdelegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales de Caso.

Las principales intervenciones previstas o en ejecución se centran en actuaciones de mejora de la eficiencia energética, que suponen en total una inversión superior a los 2,2 millones de euros, de los cuales un 30% está financiados con los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia a través de una subvención de la Secretaría de Estado de Turismo.

La presidenta de Paradores, Raquel Sánchez, ha remarcado la importancia de esta inversión, que supondrá un impulso importante para este establecimiento de la Red. “Estas actuaciones nos permiten avanzar en nuestro compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente y ser más eficientes energéticamente”. En concreto, ha explicado la presidenta, las nuevas instalaciones y mejoras permitirán un importante ahorro energético. La instalación fotovoltaica reducirá el consumo eléctrico en un 25% al año y la caldera de biomasa recortará más de la mitad el gasto económico anual en calefacción. Y en cuanto a su efecto sobre el impacto en el medio ambiente, conjuntamente van a permitir reducir la huella de carbono en 350 toneladas de CO2, lo que equivale a unos 500 árboles. Todo esto, “mejorará la calidad de nuestros servicios y el confort de nuestros clientes, apostando por un turismo sostenible, de calidad y comprometido con el entorno”.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales, ha destacado que "es una magnífica oportunidad aprovechar los fondos PRTR para mejorar un enclave tan importante para la provincia de Valladolid, al ser el único Parador con el que cuenta, y para la propia villa histórica de Tordesillas, el mejorar unas instalaciones que constituyen un destino turístico de gran interés que atrae un turismo de calidad y con gran poder adquisitivo".

En concreto se está procediendo a la mejora de la envolvente con la renovación de la cubierta para garantizar su estanqueidad, aprovechando para la reforma y adecuación de las chimeneas y el anclaje y sujeción de las cornisas pétreas. Así mismo, se dotará de una instalación fotovoltaica de autoconsumo con una potencia de 100 kW con paneles ubicados en distintos faldones del tejado con orientación sur, y se instalarán dos nuevas calderas de biomasa para calefacción y agua caliente sanitaria (ACS) y un silo de almacenamiento, con el objetivo de mejorar al menos una letra de la calificación energética del establecimiento en lo que se refiere a emisiones de dióxido de carbono.

El proyecto contempla también otras actuaciones con cargo directo al presupuesto de la cadena hotelera pública, como es la sustitución integral del circuito de tuberías de agua caliente sanitaria (ACS) y agua fría sanitaria del Parador, así como la modernización de la producción del ACS. Además, se va a sustituir la carpintería exterior, renovando la totalidad de las ventanas de las habitaciones y algunas zonas comunes , así como los huecos exteriores del Salón de la Vega, con la intervención en un total de 169 huecos de fachada.

Asimismo, se va a acometer la reforma del spa, con la eliminación del actual jacuzzi, la colocación de un nuevo solado y la dotación de tres nuevas duchas con cromoterapia, y se van a redecorar algo más de la mitad de sus 68 habitaciones, para completar la intervención que se realizó en 2020 y dar un aire más actual a toda el área residencial, y zonas comunes, instalando un nuevo mostrador de recepción y mobiliario de terraza.

Estas obras de mejora se están llevando a cabo minimizando el impacto sobre la atención de los clientes, pero obligarán a cerrar el establecimiento a partir del próximo 22 de septiembre por un periodo estimado de casi cuatro meses para garantizar la seguridad de empleados y clientes.