Las pernoctaciones en hoteles crecen un 4,2% en febrero y los viajeros, un 5,06% respecto a 2023

Los establecimientos hoteleros de Castilla y León anotaron 503.254 pernoctaciones en febrero, lo que supone un impulso del 4,24 por ciento con respecto a las registradas en el mismo mes de 2023, cuando fueron 20.469 menos. En el caso de los viajeros, se elevaron un 5,06 por ciento, hasta totalizar en la Comunidad 291.594 personas que pasaron por alguna de las nueve provincias, 14.035 más que el año anterior, según los datos facilitados por hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En España, las pernoctaciones en establecimientos hoteleros aumentaron un 10,29 por ciento en febrero, seis puntos más que la Comunidad, y superaron los 18,54 millones; mientras que la de viajeros lo hicieron un 9,27 por ciento, hasta los 6,52 millones.

En Castilla y León, donde la estancia media el pasado año fue de 1,77 días (frente a los 2,84 de España), ocho de cada diez viajeros eran residentes en España (242.617), mientras que el resto, 48.977, extranjeros. En paralelo, el 82,64 por ciento de las pernoctaciones también eran de nacionales, con 415.891, con 87.363 de no residentes.

Por territorios, las pernoctaciones aumentaron, según los datos recogidos por Ical, en tres provincias de la Comunidad, con datos encabezados por Zamora, que creció en términos porcentuales un 12,36 por ciento, con 21.569 noches. A continuación, también a dos dígitos, se encuentran, en la evolución interanual, Burgos, con un 10,55 por ciento (80.977 pernoctaciones), Valladolid, un 8,77 por ciento (80.241), y León, un 3,73 por ciento (71.386). Por debajo crecen en Salamanca, un 2,47 por ciento (106.343), y en Ávila, un 0,51 por ciento (41.698).

Por contra, bajaron en Soria, un 4,06 por ciento (27.783 pernoctaciones), en Palencia, un 0,8 por ciento (18.707), y en Segovia, con el descenso más moderado, del 0,21 por ciento (54.548).

En relación a los viajeros se elevaron en todos los territorios, excepto en Palencia, donde cayeron un 7,7 por ciento hasta los 9.364; Segovia, un 3,36 por ciento, hasta los 27.533, y en León, un 0,38 por ciento, hasta los 42.317. Por el contrario, aumentaron un 17,52 por ciento en Zamora, hasta los 12.512; un 12,41 por ciento en Burgos, hasta los 50.508; un 10,69 por ciento en Valladolid, hasta los 47.285; un 7,42 por ciento en Ávila, hasta los 27.480; un 3,84 por ciento en Soria, hasta los 15.174, y un 2,44 por ciento en Salamanca, hasta los 58.882.

Precios hoteleros y rentabilidad

La tasa anual del Índice de Precios Hoteleros (IPH) se situó de media en Castilla y León en febrero en el 4,65 por ciento, tres puntos por debajo de España, que alcanzó el 7,74 por ciento. Las comunidades autónomas que presentaron las tasas medias más altas fueron Aragón (10,87 por ciento) y Murcia (10,05 por ciento), las únicas que crecen a dos dígitos. Solo cae en Navarra, un 0,26 por ciento.

Por su parte, el ingreso medio diario por habitación disponible (RevPAR), que está condicionado por la ocupación registrada en los establecimientos hoteleros, alcanzó los 25,25 euros de media, con un 8,08 por ciento de subida, cuando en el conjunto del país fue de 67,42 euros, un 11,2 por ciento más. También, la tarifa media diaria (ADR) fue de 61,74 euros, un 6,6 por ciento más, frente a un incremento del siete por ciento (106,74 euros).