Carbayo reivindica la Escuela de Salamanca y la figura de Francisco de Vitoria

"Salamanca sigue siendo un referente en el estudio del Derecho". Así lo cree y así lo ha contado esta mañana el alcalde de la ciudad, Carlos García Carbayo, durante la inauguración del III Congreso Internacional de Derecho Civil que se celebra en la capital del Tormes, en el que participan más de 200 personas de 17 países. Entre ellos, el vicerrector de Investigación y Transferencia de la Universidad de Salamanca, José Miguel Mateos; la directora del departamento de Derecho Privado, María José Vaquero; la vicedecana de Docencia de la Facultad de Derecho, María Ángeles Guervós; el catedrático de Derecho Civil y presidente de la red Salmantina de Civilistas Lationamericanos, Eugenio Llamas; y el presidente de la Società Italiana degli Studiosi del Diritto Civile, Pietro Perlingieri.

Carbayo ponía en valor en su intervención el trabajo que se hace desde la Facultad de esta especialidad de la Usal y también desde asociaciones como Ivs Civile Salmanticense, la Red Salmantina de Civilistas Lationamericanos, y recuperaba también la figura de Francisco de Vitoria y de la Escuela de Salamanca, de cuya fundación de cumplen 500 años en este 2024.

“Fue un momento clave en la historia de la humanidad que desmiente esa Leyenda Negra que tanto nos ha perseguido, cuando fue precisamente Francisco de Vitoria alzó la voz para que los indígenas recibieran un trato digno, una propuesta inaudita para aquellos tiempos”, decía el primero de los salmantinos, en declaraciones recogidas por Ical.

En su alocución, García Carbayo destacaba el buen hacer que se hace desde su Facultad, así como el hecho de que cada año salen titulados excelentemente preparados, que se convierten en profesionales de renombre y de sus disciplinas con mayor tradición y prestigio es precisamente la del Derecho Civil.

Finalmente, felicitaba a Ivs Civile Salmanticense con Eugenio Llamas Pombo al frente, una asociación que se fundó en 2016 vinculada a la Universidad para agrupar a civilistas de todo el mundo y que hoy tiene ya 250 miembros. "Una vocación de universalidad que la engrandece”, según decía Carbayo.