Sociedad

Solo el 15% de los jóvenes entre 16 y 29 años viven emancipados en Castilla y León

Aumenta también el número de personas en esa edad en situación económica vulnerable

Enrique Cabero en la presentación de los datos sobre emancipación
Enrique Cabero en la presentación de los datos sobre emancipaciónIcal

Solo el 14,9 por ciento de los jóvenes entre 16 y 29 años viven emancipados en Castilla y León. Así lo desvela el Observatorio de la emancipación en Castilla y León, referente al primer semestre de 2022, presentado en Valladolid y donde se destaca también que ha empeorado bastante el porcentaje de jóvenes que se encontraba en una situación económica y de pobreza, al pasar del 18,9 al 25,8 por ciento.

Unos datos que para el Consejo de la Juventud de Castilla y León resultan "alarmantes, aunque se ha destacado la recuperación de la presencia de los jóvenes en el mercado laboral, aunque esa mejora se está topando con el incremento de los precios de la vivienda en el mercado libre, y que está dificultando el acceso a la mismo, debido a que el salario medio de los jóvenes en la Región es 946 euros netos al mes. Es decir, que para alquilar en solitario un joven debe destinar el 61,7 por ciento de sus ingresos, y si compra una vivienda, significaría una hipoteca que se levaría el 31,7 por ciento.

Este estudio constata los efectos “inmediatos” de la entrada en vigor de la reforma laboral en marzo de 2022 en cuanto a la contratación registrada. En el segundo trimestre de 2021, el 7,3 por ciento de todos los nuevos contratos suscritos por jóvenes era indefinido, mientras que en el año 2022 ascendía hasta el 35,5 por ciento. No obstante, todavía había más contratos temporales qué indefinidos, ya que el 64,5 por ciento de los contratos registrados ha sido temporal.

La presidenta del Consejo de la Juventud de Castilla y León, Sandra Ámez, lamentó que la “notable” mejoría en la contratación registrada no ha evitado hablar de “personas trabajadoras pobres”. No en vano, subrayó que en 2021 (últimos datos disponibles) se observa un empobrecimiento y mayor riesgo de exclusión social de los jóvenes en la Comunidad que en el año anterior, situándose el 25,8 por ciento, tras subir casi 7 puntos. Pese a ello, es inferior a la media nacional, donde se situó en el 33,5 por ciento.

Los jóvenes de entre 16 y 29 años suponían a principios de 2022 el 12,6 por ciento de toda la población de Castilla y León. Un menor peso demográfico que, según el Consejo de la Juventud, coincide con una mayor probabilidad que una persona joven nacida en la Comunidad estuviera residiendo en otras regiones. Al comparar la proporción de jóvenes en el primer semestre de 2022 con el mismo periodo de 2021, Castilla y León ha perdido 2.467 jóvenes.

Mientras, el presidente del Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León, Enrique Cabero, valoró la importancia de la formación en los diferentes niveles, ya sea en la FP o la universidad, ya que, a su juicio, eso repercute más tarde en la consecución de empleo. “Hay que formarse para tener una buena cualificación y luego tener un mejor trabajo”, precisó. En su opinión, hay una tendencia de separar “en exceso” el periodo formativo y el empleo pese a que no son compartimentos estancos. No en vano, consideró que ambos se puede complementar, sobre todo cuando es un empleo formativo. “Castilla y León se ve como un buen sitio para formarse pero, a veces, sigue la tendencia de que luego hay que irse fuera a trabajar”, sentenció.

Cabero mencionó, según Ical, el contrato de formación en alternancia, que es muy importante y está muy vinculado en la formación dual de FP y universidad, y el contrato para adquirir experiencia profesional para los titulados, al permitir la conexión en los periodos de formación teórica y práctica.

El presidente del CES reiteró la necesidad de invertir en juventud ya que la Comunidad necesita más jóvenes, por lo que demandó incorporar la perspectiva de edad en las políticas de la Junta y las Cortes para así acometer, “con solvencia”, el reto demográfico.