Cultura

La transversalidad del Museo Nacional de Escultura

Este espacio museístico ubicado en Valladolid acoge hasta el 6 de julio la exposición "Intersectio" que pone en diálogo al artista contemporáneo Santiago Ydáñez con el escultor barroco Nicolás de Bussy

Exposición ‘ Intersectio. Ydáñez / Bussy’,
Exposición ‘ Intersectio. Ydáñez / Bussy’,Miriam ChacónIcal

El Museo Nacional de Escultura, con sede en Valladolid, acoge hasta el próximo 6 de julio la exposición ‘ Intersectio. Ydáñez / Bussy’, que pone en diálogo las creaciones del artista contemporáneo jienense Santiago Ydáñez con las piezas del escultor barroco Nicolás de Bussy. La exposición forma parte de los actos de conmemoración del 150 aniversario de la creación de la Real Academia de España en Roma, una institución capital para la cultura española que, desde su creación en 1873, es uno de los principales exponentes de la creación y la investigación artística del país.

Se trata da once piezas expuestas en siete salas en las que el visitante encontrara "las obras de Ydañez en diálogo con formas, policromías e iconografías que en algún caso pertenecen a la colección histórica del museo, "pero que en su contexto también fueron emblemas de modernidad", según Javier Andrés, comisario de la muestra, para quien este espacio museístico vallisoletano es un fuente de inspiración para artistas contemporáneos y en esta muestra hay un ejercicio de transversalidad invita a la reflexión sobre la constante actualización de referencias visuales y materiales que el usuario esta invitado a experimentar en el museo.

La muestra plantea la instalación, en las salas 5, 8, 9, 14 y 20, de una selección de esculturas y pinturas que mantienen una relación conceptual, material o iconográfica con las esculturas de Berruguete, Juni o Fernández.

El trabajo de Ydáñez, residente en la Academia en 2016-2017, plantea un ejercicio de cohabitación de imágenes, que aparta a la colección permanente del Museo Nacional de Escultura de la mirada rutinaria y la contagia del tiempo presente, al tiempo que lanza una honda reflexión acerca del barroco, de la imagen de culto y de la estética, así como de las relaciones entre materia, forma e iconografía.

En su paso por Roma, el artista español confirmó su fascinación por los maestros del barroco, que explora incansablemente en su obra, aunque relativizando aforismos tradicionales como santidad, misticismo o pathos. En esta muestra lo logra proponiendo un recorrido en el que once de sus obras (entre grandes lienzos, esculturas y objetos antiguos) conversa con la mejor colección de escultura española de la Edad Moderna, informa Ical.

El punto culminante de la exposición se encuentra en la confrontación entre una escultura en madera policromada del propio Ydáñez (‘Cristo como La Fuente’) con un referente de la escultura barroca hispana: el ‘Cristo de la Sangre’ de De Bussy, pieza invitada prestada generosamente por la Archicofradía de la Preciosísima Sangre y procedente de la iglesia del Carmen de Murcia. El modelo barroco y su innovadora versión actual revisitan el Torculus Christi o Cristo como ‘Lagar místico’, un complejo tema de la iconografía cristiana donde ambos autores dialogan en un juego de continuidades que refuerza la idea de que los maestros del Renacimiento y del Barroco siguen siendo una fuente de inspiración esencial en la creación artística contemporánea. Una versión en la que prescinde de la cruz y que rompe los esquemas compositivos habituales en la representación de Cristo, "inclinando su cuerpo para dejar caer la sangre de sus llagas en el cáliz".

Santiago Ydáñez (Jaén, 1967), es un artista con una trayectoria consagrada a nivel nacional e internacional. Graduado en Bellas Artes en la Universidad de Granada, ha realizado talleres, entre otros, con Juan Genovés y Mitsuo Miura. Ha recibido importantes distinciones y es actualmente uno de los pintores españoles con mayor proyección internacional. Entre otros, ha obtenido el Premio de Pintura ABC en 2002 y Premio de Pintura Generación 2002 de Caja Madrid, la Beca del Colegio de España en París del Ministerio de Cultura en 2001 y la Beca de la Fundación Marcelino Botín en 1998. Fue becario de la Academia en 2016-2017. Su obra se encuentra en las colecciones de instituciones como la Fundación Botín (Santander) o el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid).

Nicolás de Bussy. Nicolás de Bussy (Estrasburgo, 1640 – Valencia, diciembre 1706) fue un escultor barroco, formado en el ámbito alemán, que trabajó en España en la órbita de la corte de Felipe IV y, más concretamente, de Carlos II, de quien fue escultor de cámara y, además, le concedió el hábito de Santiago. Tras su paso por Madrid, se trasladó al área levantina de Murcia y Valencia, donde desarrolló un importante trabajo escultórico, del que quedan ejemplos tan destacados como el Cristo de la Sangre.