Cultura

‘Vía Crucis, el musical’ llega a la Catedral de Valladolid para ofrecer “una experiencia sorprendente que quedará en los espectadores por mucho tiempo”

Este viernes 24 de febrero se representará el proyecto en tres únicas funciones

Presentación de la representación ‘Vía crucis. El musical’, con presencia del arzobispo de Valladolid, Luis Argüello; el director de la obra, Toño Casado, y el actor que interpretará a Jesús, Adrián Salzedo, escoltados por el Ecce Homo de Gregorio Fernández y el Santísimo Cristo de la Preciosísima Sangre
Presentación de la representación ‘Vía crucis. El musical’, con presencia del arzobispo de Valladolid, Luis Argüello; el director de la obra, Toño Casado, y el actor que interpretará a Jesús, Adrián Salzedo, escoltados por el Ecce Homo de Gregorio Fernández y el Santísimo Cristo de la Preciosísima SangreLeticia PérezIcal

Con una “sorprendente” puesta en escena, que “muestra la vanguardia en cuando a puesta en escena luz, sonido y música”, este viernes 24 de febrero desembarca en la Catedral de Valladolid ‘Vía Crucis, el musical’, un espectáculo escrito y dirigido por el religioso salmantino Toño Casado, que brindará a los espectadores “una experiencia que quedará en ellos por mucho tiempo”. El templo acogerá tres funciones, a las 11.00, a las 19.00 y a las 21.00 horas, con las entradas agotadas hace días para los pases vespertinos, y algunas localidades aún disponibles para el pase matinal, al precio de 15 euros (seis para los niños y estudiantes). El montaje, que vivió su puesta de largo en la Mezquita de Córdoba el 12 de marzo del pasado año, llega a Valladolid tras pasar por la parroquia madrileña del Pilar, donde Casado ejerce como cura, y por la Catedral de La Almudena de Madrid. Tras su paso por Valladolid, viajará al Pilar de Zaragoza, para representarse ante su altar recién restaurado, y regresar posteriormente de nuevo a la capital de España.

El arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, subrayó en la presentación del ‘show’ el “coloquio” y la “relación permanente entre culto y cultura” que se ha perpetuado a través de los siglos a través de la Iglesia, y señaló que esa sintonía “expresa lo que la gracia es capaz de hacer en la carne, en la naturaleza, y de ahí brota una cultura, una propuesta de bien y de belleza”. De esa forma, desde la Diócesis han apostado por acoger esta representación de “una expresión cultural de esta época” en el primer viernes de Cuaresma, “escuchando los textos cantados que nos ayuden a meditar en las estaciones del Vía Crucis, con el apoyo de una iconografía sencilla, para contemplar el camino de Jesús hacia la cruz”.

Desde el altar, el montaje estará presidido por el Ecce Homo de Gregorio Fernández, que tradicionalmente custodia el museo catedralicio, y por el Santísimo Cristo de la Preciosísima Sangre, ha sido trasladado para la ocasión desde Nuestra Señora de La Antigua. Además, una pantalla recogerá imágenes de algunas de las tallas procesionales más importantes de la ciudad durante la representación, algo que a juicio del autor “hará que mucha gente sienta un pellizquito en el corazón cuando vean que su cristo o su virgen cantan o les hacemos decir algo” .

Camino a la cruz

El creador de la obra, Toño Casado, destacó que la representación (que tiene una duración de hora y cuarto) “hará que la gente sienta de una manera especial lo que sintieron aquellos personajes”. Junto a él, que ejerce como narrador, el relato está protagonizado por Adrián Salzedo como Jesús, Laura González como la Virgen María, María Virumbrales como Verónica y Cristian Escuredo como el Cirineo. Los cuatro actores cuentan con una dilatada experiencia en el teatro y en los musicales en particular.

El autor del libreto explicó que la obra “es una propuesta para toda la ciudad, no solo para la gente de la Iglesia”, y destacó que “todos vivimos en vía crucis, rodeados de una realidad con terremotos, guerras o dificultades económicas, y gracias a Dios aparecen a nuestro lado cirineros que nos ayudan, madres que nos animan o verónicas que nos recuerdan cómo éramos cuando estábamos alegres”.

Casado no dudó en relacionar la propuesta con las procesiones, que en su opinión son “el espectáculo perfecto”, ya que recogen la luz, la representación de las escenas de Jesús, el perfume, la música, el vestuario… Las procesiones te conmueven, son algo muy efectista”. En ese sentido, definió este musical como “un espectáculo-oración”, donde “los que son creyentes rezan y el resto simplemente lo ve”, con el cual no buscan adeptos, sino que se limitan a “mostrar a Jesús, y la gente cuando ve a Jesús se enamora de él”. “Los musicales te llegan por todos los sentidos”, afirmó antes de señalar que “el teatro tiene mucho que ver con la Iglesia”, aludiendo a la existencia de los autos sacramentales.

Por su pare, el protagonista, Adrián Salzedo, cuyo último papel ha sido como Hernán Cortés en ‘Malinche’, el último musical de Nacho Cano, explicó que tras 23 años trabajando en musicales, teatro y series, “representando muchos personajes y transmitiendo muchos mensajes diferentes”, ‘Vía Crucis’ le ha “regalado algo diferente: la posibilidad de conectar con todas las personas a través del amor”, inform Ical.

“A todos nos une la forma en que tratas y eres tratado por los demás, y todo se basa en el amor, en tratar bien a las demás personas, como decía el Cirineo. Poder interpretar a Jesucristo es más que un reto un regalo. Es sencillo conectar desde ahí, porque lo que el público te regala y vive contigo es único, efímero pero hermoso”, subrayó.