El desafío independentista
Pinchazo de Tsunami Democràtic en su puesta de largo mundial
Apenas 5.000 personas acuden a la manifestación, y se esperaban unas 30.000, aunque cortaron la Diagonal
A expensas de lo que pudiera ocurrir durante el partido “clásico” entre el Barcelona y el Real Madrid, aplazado desde hace 53 días por la situación de incertidumbre social y política en Cataluña, lo cierto es que la convocatoria de Tsunami Democràtic en las cercanías del Camp Nou fue un pinchazo, uno más del independentismo este año. Tras casi una hora de manifestación, justo al lado del Hotel Sofía, donde se concentraban el Barça y el Real Madrid para el partido, los Tsunami han decidido cortar el tráfico de la principal arteria de Barcelona, la avenida Diagonal. Dejaron sólo un carril abierto. A media tarde aún estaba cortada, aunque no hubo más incidentes.
También cortaron otras calles de la zona, como la confluencia entre Aristides Maillol y travesera de Les Corts, la rotonda con Doctor Marañón, y la calle Comandante Benítez.
Lo hicieron con las mismas proclamas que un rato antes. Es decir, "independencia", "fuera fuera la Justicia española", “prensa española manipuladora" y, en referencia a los numerosos furgones que custodiaban el sitio, "vuestro conseller está en la prisión", hablando de Joaquim Forn y gritándolo a unos Mossos d'Esquadra que tenían totalmente blindado el hotel y la avenida Arístides Maillol, que va directo hacia el estadio.
Pese a que habían más de 30.000 inscritos, la cifra de asistentes no se acercó ni de lejos. En los últimos días Tsunami Democràtic incluso había pedido a través de las redes sociales. Muchos de los asistentes llevaban encima unas pequeñas pancartas con el lema “Spain, sit and talk” (España, siéntate y habla”.
Cabe destacar que, siempre según las cifras de la Guardia Urbana, los 5.000 manifestantes resultan ridículos comparados con las 95.000 personas que habrá dentro del campo.
En los alrededores del estadio también hay aficionados que han acudido con horas de antelación, que lucen camisetas y bufandas de su equipo, y algunos también llevan banderas 'estelades'.
Cerca del estadio Tsunami ha colgado una pancarta con el mensaje ‘Cambiemos el estado de las cosas’ y decenas de manifestantes llevan banderolas azules con los lemas de la convocatoria.
Un grupo de una treintena de personas ha recorrido el perímetro del Camp Nou con pelotas hinchables negras y reproducciones de balas de foam de medio metro aproximadamente en señal de protesta por el uso de proyectiles antidisturbios.
En el comunicado, recuerdan que las acciones de este miércoles, como en todas las de Tsunami, se enmarcan “en la más estricta no violencia”.
"El Tsunami es como el agua. Se adapta y adopta ideas", ha dicho el movimiento, que ha animado a los manifestantes a traer una pelota inflable y escribir un mensaje en ella, a partir de una información publicada por 'La Vanguardia' en la que aseguraba que la acción que iban a hacer en el campo sería lanzar pelotas inflables.
Los Mossos d'Esquadra, junto a la Guardia Urbana y la seguridad privada del club, han iniciado la mañana de este miércoles pasadas las 9.00 el dispositivo para garantizar la seguridad en el entorno del estadio, que ha contado con controles y filtros de seguridad y en el que participan antidisturbios, Tedax, Canina, Seguridad Ciudadana e Información.
En total, unos 1.000 Mossos d'Esquadra y 2.000 efectivos de seguridad privada del FC Barcelona se desplegarán en los alrededores del campo de fútbol barcelonés, además de agentes de la Guardia Urbana de Barcelona, y el Ministerio del Interior ha desplazado efectivos antidisturbios de la Policía Nacional y la Guardia Civil.
Por su parte, el recién creado colectivo Lliri de Foc ha emitido un comunicado en el que ha asegurado que están "preparados para marcar un gol al Estado fascista" y en el que aseguran que nunca estarán contra el diálogo siempre que no incluya a opresores como interlocutores.
En el comunicado, desmienten informaciones que les atribuyen, según ellos erróneamente, actos terroristas y enaltecimiento de la violencia, y piden a los manifestantes protegerse ante "la brutalidad de una policía antidemocrática, radical y fuera de control parlamentario" y aseguran que se defenderán, sin caer en provocaciones, de cualquier agresor.
“Porque la libertad y los derechos no se regatean, nos vemos en el Camp Nou para pedir menos sitandtalk y más escuchar al pueblo soberano”, avisan.
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