Sociedad Civil Catalana acusa al PSOE de asumir el “relato independentista” y pide una reunión con Sánchez

Sociedad Civil Catalana, la entidad de referencia del constitucionalismo en Cataluña, asume ahora un papel complicado tras el nuevo horizonte político que ha abierto el acuerdo entre PSOE y ERC para la investidura de Pedro Sánchez. La organización que preside Fernando Sánchez Costa ha emitido esta mañana un comunicado en el que acusa a los socialistas de asumir el “relato del independentismo” tras el pacto con Esquerra y muestra su preocupación por la mesa de negociación entre gobiernos, que se pondrá en marcha, previsiblemente, en un plazo de 15 días después de la reelección del candidato socialista. Ante estas circunstancias, Sánchez Costa va a pedir una reunión con el presidente del Gobierno durante los próximos días.

SCC, que había presionado durante los últimos días para que las fuerzas constitucionalistas acercaran posturas y consiguieran acordar la investidura de Sánchez para evitar la influencia del independentismo, lamenta que “no se haya producido ni intentado” un pacto entre PSOE, PP y C’s. “Sentimos verdadera tristeza y desamparo al constatar que, una vez más, los ciudadanos constitucionalistas catalanes hemos sido casi invisibles para las decisiones de los partidos políticos nacionales", asegura la entidad en el comunicado.

La organización constitucionalista expresa su preocupación porque la gobernabilidad de España ha quedado en manos de ERC y porque considera que el diálogo bilateral, que rechaza si no tiene encaje institucional ni parlamentario, “puede volver a confundir la postura de los nacionalistas con el sentir y la voluntad de la mayoría de los catalanes”.

Ante este escenario y el temor de que el Gobierno atienda únicamente las exigencias del independentismo para resolver la crisis catalana, SCC avisa que “no puede construirse ninguna solución a la problemática en Cataluña sin contar con la mayoría social catalana que no quiere la independencia”. “Una ciudadanía históricamente desatendida por el poder catalán y por el poder central”, asegura. La vuelta al acuerdo con el nacionalismo catalán ha despertado la inquietud en amplios sectores del constitucionalismo a que el Gobierno reproduzca los errores del pasado, en materia de cesiones, y refuerce el proyecto independentista.

SCC, además de haber contribuido a movilizar a la sociedad civil constitucionalista, que hasta ahora siempre había estado desactivada en comparación con el independentismo, que ha tomado la calle con mucha fuerza e insistencia durante los últimos años, también ha tomado la iniciativa política y ha trazado un camino en busca de la “construcción de un futuro común” para todos los catalanes en el marco del proyecto común español y europeo.

Esa ruta tiene como base un decálogo de propuestas, que trasladará a Sánchez en la reunión y que contempla una “segunda normalización” que reconozca la riqueza de Cataluña, expresada en catalán y español; la neutralidad de la administración y de las instituciones; descolonización ideológica de los espacios públicos -eliminar todo signo partidista-; una reforma del sistema electoral para corregir la “sobrerrepresentación" del independentismo; acabar con el sistema de inmersión lingüística y el “adoctrinamiento escolar"; despolitizar a los Mossos d’Esquadra; medios públicos pluralistas; cese de la política clientelar; rechazo a la unilateralidad y la violencia; y, auditoría del “procés”.