El Parlament reivindica de nuevo el derecho de autodeterminación

Poco después del encuentro entre Pedro Sánchez y Quim Torra en el Palau de la Generalitat, el Parlament ha aprobado una moción que reivindica el derecho de autodeterminación. Con los votos a favor de los tres grupos parlamentarios independentistas (JxCat, ERC y la CUP) y la abstención del partido de Ada Colau, la iniciativa ha salido adelante.

La moción, en su segundo punto -incluye doce en total-, manifiesta que hay que “promover las iniciativas y compromisos políticos necesarios para acordar una solución democrática al conflicto político entre Cataluña y el Estado español, siguiendo el Acuerdo Nacional para el ejercicio del derecho de autodeterminación y la amnistía que el Gobierno debe impulsar en el plazo más breve posible”.

De esta manera, el Parlament es la segunda vez que reivindica el derecho a decidir en este 2020: la primera vez fue en el Pleno del 4 de enero, en protesta por el acuerdo de la Junta Electoral Central de inhabilitar a Torra como diputado. El independentismo, así, pone de nuevo a prueba al Gobierno y su voluntad por “desjudicializar” el “conflicto político” con Cataluña.

El punto cuatro de la moción, también aprobado con los votos de los independentistas y la abstención de Catalunya en Comú Podem, reclama mediación internacional para dotar el diálogo de garantías. Además, en el punto nueve y diez rechaza la resoluciones del Tribunal Supremo y de la Junta Electoral Central que pretende inhabilitar a Torra, y en el punto doce, denuncia “la injusticia y la falta de fundamento de la prisión condicional” de los independentistas detenidos el pasado 23 de septiembre por un presunto delito de terrorismo.

La iniciativa ha sido impulsada por JxCat, que ha defendido que el derecho de autodeterminación es “la única manera de llegar a una solución de este conflicto”. Asimismo, como gesto de compromiso con la “desjudicialización”, Gemma Geis ha pedido que los socialistas se posicionen contra el suplicatorio que votará el Parlamento Europeo para que Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí pierdan la inmunidad parlamentaria y puedan ser extraditados a España.

Sergi Sabrià (ERC) ha agradecido a JxCat que se hayan incorporado a la mesa de negociación acordada por ERC con el PSOE para abordar el derecho de autodeterminación y la amnistía pese a las dudas que han expresado los neoconvergentes en todo momento. Pese al “escepticismo” que ha reconocido Sabrià en el restablecimiento del diálogo con el Estado, ha dicho que no se rendirán y volverán “una y otra vez” con el diálogo “por bandera”.

Marc Parés (Catalunya en Comú Podem) ha pedido a los independentistas que abandonen la vía unilateral y ha desmentido que España “sea irreformable”. A su juicio, hay una España “republicana y progresista” y un Gobierno de coalición para dar salida al “embrollo” político en Cataluña.

Eva Granados (PSC) se ha posicionado en contra de la moción porque ha considerado que es una moción que “descalifica a un estado derecho como es el español". De hecho, ha recordado que España siempre aparece en las mejores posiciones en “todos los indicadores más prestigiosos sobre calidad democrática”.

Sonia Sierra (C’s) ha reprochado que es el independentismo quien “recorta derechos” cuando impiden la circulación cortando carreteras; cuando impiden que los alumnos catalanes puedan escolarizarse en castellano; o, cuando boicotean actos de Sociedad Civil Catalana o S’ha Acabat.

Alejandro Fernández (PP) ha acusado a los independentistas de “tozudos” y de “tener la moral del Alcoyano" porque “creen que pueden remontar un partido (...) pero no se dan cuenta que están con un monotema que no les llevará a ningún lado. Vuelvan a la realidad de una vez", ha agregado.