Coronavirus

Barcelona desierta, pero el metro lleno

El transporte público conoció aglomeraciones a primera hora de la mañana

Desde el metro se aconsejaba no viajar si no era necesario
Desde el metro se aconsejaba no viajar si no era necesarioTMBTMB

La prueba de fuego para Barcelona era hoy lunes, su primer día laborable tras el anuncio del estado de alarma. Con un cielo nublado que parece ser una metáfora del ambiente que se respira, la ciudad sigue respirando aunque solamente con aquellos servicios esenciales.

A primera hora de la mañana, el metro registró más gente que en otras ocasiones. La gente, que se trasladaba a sus puestos de trabajo, constataron en primera persona que era imposible mantener la distancia de seguridad de un metro. Los viajeros se encontraron con avisos por altavoces y carteles donde se aconsejaba “no viajar, excepto por razones inaplazables”. Desde TMB se esperaba que la movilidad se redujera en metro y autobús, pero finalmente no ha sido así.

En varias de las empresas situadas en la Zona Franca era fácil deducir que todo continuaba normal, como un día cualquiera, solamente viendo el número de vehículos de sus respectivos aparcamientos. Por otra parte, el tráfico de vehículos en las entradas de Barcelona sí que notó una notable reducción mientras que otras vías, como la C-31, otros días repletas de coches camino del aeropuerto de El Prat, estaba prácticamente vacía.

La calle es un buen lugar para tomar el pulso del confinamiento. Poca, muy poca gente se ha atrevido a salir con la excepción de pasear a su mascota, sacar dinero en las entidades bancarias que permanecen abiertas o de comprar algún producto en los supermercados. Sin embargo, las principales cadenas ya han anunciado que se van a restringir sus horarios de apertura.

Barcelona sigue respirando, sigue viviendo, pero sabe que las cosas son distintas. Sus calles desiertas en barrios tan populares como Sants, Les Corts o Gràcia son la mejor imagen de que la gente ha tomado conciencia de lo que hay que hacer: permanecer en casa.