El PIB caerá entre un 7,6% y un 8,8% en Cataluña en 2020, según la Generalitat

La crisis del coronavirus tendrá un gran impacto sobre la economía en Cataluña. El vicepresidente económico de la Generalitat, Pere Aragonès, ha puesto cifras esta mañana a las consecuencias de la pandemia, aunque pueden variar en función de la evolución de la crisis sanitaria. En estos momentos, Aragonès proyecta una caída del PIB de entre el 7,6% y el 8,8% en 2020 y un aumento de la tasa de paro, que oscilaría entre el 17,1% y el 18% en la autonomía. Aragonès ha dibujado diferentes escenarios y ha pronosticado un crecimiento en 2021.

Ha planteado dos escenarios para cada indicador: un escenario base, con una política económica contundente -apoyada por un mayor gasto público-; y, un escenario pesimista, con una política económica menos contundente y una crisis sanitaria más persistente. En este sentido, Aragonès ha reclamado “políticas contracíclicas y de estabilización” y ha pedido aparcar “la austeridad y recortes" porque afectaría de forma “más negativa sobre la economía”. “Es fundamental que en esta crisis no se opte por las medidas de las crisis anteriores, que fueron las medidas de la austeridad, porque estamos ante una situación con una naturaleza totalmente diferente, es un choque de oferta y un choque de demanda”, ha afirmado en una comparecencia. “Ahora hace falta mantenimiento e incremento del gasto público, lo podemos hacer y estamos en condiciones de hacerlo”, ha añadido.

En el escenario base, la Generalitat estima que el PIB caiga un 7,6% este año y crezca un 6,5% en 2021. En un escenario más pesimista, la contracción sería del 8,8% este año y el incremento sería menos intenso el año que viene (5,1%). El ejecutivo catalán prevé una fuerte caída durante este segundo trimestre (abril-junio), que irá seguido de un rebote en el tercero (julio-septiembre), mientras que el cuarto (octubre-diciembre) registrará ya un crecimiento más moderado. La Generalitat también precisa que el crecimiento variará en función de los sectores económicos y que, en 2021, todo indica que no se habrá recuperado el volumen de PIB previo a la crisis sanitaria.

Respecto a la tasa de paro, la previsión que tiene la Generalitat para el escenario base es que aumente este año hasta el 17,1% y estima una destrucción de 226.800 empleos. Para el escenario pesimista, 2020 acabaría con una tasa de paro del 18% y se destruirían 261.800 puestos de trabajo. En este sentido, el informe de previsiones remarca el impacto “especialmente negativo" de la crisis en sectores como la hostelería, restauración, ocio, comercio o transportes, afectadas por las medidas de distanciamiento social. Para 2021, la previsión es una creación neta de entre 122.600 y 92.500 puestos de trabajo. El año que viene la tasa de paro estaría entre un 14,2% y un 15,9%.

Asimismo, la previsión es que el consumo de los hogares caiga entre un 7% -escenario base- y un 7,3% -escenario pesimista- en 2020 por la reducción de la demanda -mucho más limitada por el confinamiento-; por la reducción de las rentas -debido a la destrucción del empleo-; y, el aumento de tasa de ahorro -efecto precaución ante unas expectativas más pesimistas-. En 2021, crecería entre un 3,9% y un 3,4%. La formación bruta de capital (inversiones) caería entre un 19,2% y un 20,3% en 2020, mientras que crecería entre un 8,7% y 5,9% en 2021.

El consumo de las administraciones públicas, empujado por su intervención en la crisis sanitaria, crecería entre un 7,3% y un 4,3% en 2020. En 2021, el crecimiento se desaceleraría y oscilaría entre un 3% y un 1,8%.

Las exportaciones catalanas se reducirán entre un 15,5% y un 17,1% en 2020 y crecerían entre un 17,1% y 12,5% en 2021. Las importaciones estarían en valores parecidos: caída de entre el 17,9% y 19,6% en 2020 y aumento de entre el 14,2% y 9,7%.

Finalmente, Aragonès pide un fondo de reconstrucción financiado con transferencias directas y no endeudamiento y prevé que la asignación para Cataluña debería de ser de 4.000 millones de euros: la mitad para afrontar el gasto sanitario y asistencial (el Govern estima que el gasto adicional en Salud por la crisis del coronavirus es de 1.800 millones de euros) y la otra mitad para “garantizar la recuperación económica”.