Independentismo

Puigdemont regresa mañana a la frontera con España para agitar el “procés”

El expresident participará en Perpiñán en una reunión del Consell per la República para abordar una nueva estrategia para la independencia

Carles Puigdemont en Bruselas. EFE/EPA/OLIVIER HOSLET
Carles Puigdemont en Bruselas. EFE/EPA/OLIVIER HOSLETOLIVIER HOSLETEFE

Carles Puigdemont regresará mañana a Perpiñán, ciudad francesa situada a 30 kilómetros de la frontera con España. El expresident presidirá una reunión del Consell per la República, organización que impulsó en diciembre de 2018 con el objetivo de internacionalizar el “procés” e influir en la política catalana desde Bélgica. En el encuentro de mañana está previsto que se aborde una nueva estrategia para plantar cara al Estado e impulsar el proceso de independencia.

El Consell per la República reúne cada 15 días -aproximadamente- a la dirección -Consell de Govern-, compuesta por 12 miembros, que aglutina a diferentes actores del independentismo -presidido por Puigdemont, están los exconsellers fugados de la Justicia en Bélgica (Lluís Puig, Toni Comín y Clara Ponsatí), la ANC, Demòcrates o Plataforma per la Llengua-. Esquerra, representada por Isaac Peraire, siempre ha visto con mucho recelo esta iniciativa, mientras que partidos y entidades importantes en el independentismo, como la CUP y Òmnium Cultural, no se han integrado.

Lo cierto es que con el Consell per la República, Puigdemont tenía la voluntad de crear un espacio de poder e influencia a distancia sobre la política catalana y el “procés”. Sin embargo, desde su creación, apenas ha tenido relevancia e, incuso, el propio independentismo parece haberle dado la espalda. Prueba de ello es que el expresident se planteó alcanzar un millón de asociados -es decir, apeló a todos los ciudadanos que le votaron en las elecciones del 21 de diciembre de 2017-, pero más de un año y medio después solo ha logrado 88.172 adhesiones.

El encuentro de mañana llega justo en un momento de máxima importancia para Puigdemont. Ante el previsible fracaso en las negociaciones con el PDeCat, el expresident anunció ayer la creación de un nuevo partido, que necesitará una acelerada puesta a punto ante la inminencia de las elecciones. Puigdemont también desembarca en Perpiñán justo una semana después de que el Frente Nacional, partido de Marine Le Pen, se impusiera en las elecciones municipales.

Allí mismo, en Perpiñán, Puigdemont protagonizó un multitudinario mitin el 29 de febrero y llamó al independentismo a prepararse para la “lucha definitiva”. En este sentido, con la nueva formación que tiene previsto constituir el 25 de julio, se ha marcado como objetivo acelerar el proceso de independencia.

Puigdemont trata de recuperar protagonismo en la escena política tras meses marcados por la crisis del coronavirus, en los que ha pasado desapercibido. Precisamente, los efectos económicos y sociales de la emergencia sanitaria pueden desplazar a un segundo plano al “procés”, algo que podría lastrar mucho al expresident y sus aspiraciones electorales.

Tanto Puigdemont como sus afines tratan de agitar de nuevo el “procés” porque en la tensión y la confrontación constante con el Estado es donde mayor rédito político pueden extraer. El PDeCat, en cambio, ha escogido ahora el camino del pragmatismo respecto al proceso independentista e intenta volver a situar de nuevo la gestión en el centro. Una estrategia que Esquerra también ha implementado en los últimos tiempos y le ha permitido vencer sucesivamente en las elecciones y liderar ahora todas las encuestas de cara a los comicios catalanes.