Marc, tras 90 días en la UCI: “Los jóvenes tienen que saber que el coronavirus no es una broma”

No hay ninguna duda de que la pandemia ha afectado en Cataluña a miles de personas, mostrando todo tipo de historias humanas. Algunas tristes, desgarradoras, otras más positivas, otras de supervivencia, mucha variedad, pero destacan las que tienen como protagonistas a personas con fortaleza. Marc es una de ellas.

Marc tiene 34 años y el pasado 2 de julio recibió el alta médica después de pasar 90 días ingresado en el Hospital Parc Taulí de Sabadell por el coronavirus. De estos tres meses, ha pasado 60 días en la UCI, ha estado a punto de morir y la enfermedad le ha dejado graves secuelas. Incluso la consellera de Salud. Alba Vergés, le dedicó un tuit el día en el que pudo volver a casa. Lo mismo hicieron los profesionales del hospital.

Hace dos semanas Marc abandonó la UCI y fue trasladado a planta. Antes de volver, tuvo un bello detalle con las personas que le han cuidado durante tres meses, y grabó un video para agradecerles su labor, y para lanzar mensajes a los jóvenes que creen que el coronavirus “es cosa de mayores” y que incumplen las tres normas básicas para evitar los contagios.

En el video, su advertencia es que “el coronavirus no es sólo cosa de personas mayores, aunque pensamos que sí. A los jóvenes también nos afecta”. El hospital ha compartido el vídeo de Marc en su cuenta de Twitter. Otro de los mensajes lanzados es que “el Covid no es una broma. Haced caso a los profesionales”. El vídeo acaba con la imagen de Marc saliendo del hospital en silla de ruedas.

Marc estuvo a punto de morir a causa de la enfermedad. En un principio el virus se le manifestó de forma leve, los primeros síntomas que tuvo fueron diarreas y fiebre. Después de hacerse las pruebas en el hospital y dar positivo, los médicos lo enviaron a casa ya que no era un caso grave.

Pocos días después, sin embargo, Marc sufrió una neumonía que le causó un trombo pulmonar bilateral. Ante las complicaciones tuvo que ser ingresado directamente en la UCI donde sufrió dos paros cardiacos y estuvo a punto de morir.

El joven ya está en casa, pero de momento no puede caminar ni hablar. “Es posible que le queden secuelas”, aseguraron desde la UCI. Por eso a partir de ahora tendrá que estar bastante tiempo haciendo recuperación para volver, poco a poco, a la normalidad. “El coronavirus no es una broma”, advierte Marc.