Cataluña Primero
Las vacunas llegarán la víspera de Reyes
El Procicat estudia ampliar al área metropolitana el confinamiento perimetral de los fines de semana de Barcelona. La fase 1 se mantiene hasta el día de los Inocentes
Cataluña formará a un equipo de 500 enfermeraspara empezar a administrar la vacuna de la Covid-19 tan pronto como lleguen las primeras dosis: el 4 de enero. Se organizarán en 25 equipos de 20 enfermeras y trabajarán en parejas. En Barcelona, se movilizarán seis equipos con 120 profesionales. La subdirectora general de Promoción de la Salut, Carme Cabezas, y la consellera de Salut, Alba Vergés, han ofrecido esta mañana mas detalles de la campaña de vacunación contra la Covid que ha diseñado la Generalitat de Cataluña. Antes de empezar, han hecho un llamamiento a los colegios de enfermeras, profesionales de hospitales y de la atención primaria para reclutar a las candidatas. “Creemos que tendremos éxito y que habrá muchas profesionales que querrán colaborar”, ha dicho Cabezas. Todas recibirán una pequeña formación para familiarizarse con las primeras vacunas que llegarán: la de Pfizer/Biontech, primero, y la de Moderna, unas semanas después.
Ambas se han elaborado con una técnica nueva, en vez de utilizar virus atenuados o desactivados, como en las vacunas tradicionales, utilizan ARN mensajero con las instrucciones para producir la proteína de la espícula del virus. La idea es que el organismo produzca esta proteína y se la presente al sistema inmune. Así sabrá cómo actuar cuando se encuentre con el virus de verdad. Las dos aseguran tener una eficacia que roza el 95% y se conservan a temperaturas ultrafrías. No se sabe aún cuánto tiempo durarán sus efectos. Los expertos confían en que llegue a los 18 meses. Lo que sí se sabe es que se necesitan dos dosis. Con la primera partida asignada a Cataluña, Vergés calcula vacunar a 500.000 personas antes de Semana Santa.
Proceso de vacunación progresivo: objetivo llegar al 70% de la población en verano
En la primera fase de vacunación, que arrancará en enero, las enfermeras saldrán a buscar a los candidatos. Porque los primeros en recibir la vacuna serán los residentes y el personal de los geriátricos y de centros de personas con discapacidad. Antes de la pandemia, Cataluña contaba con 64.000 residentes.
Luego, vendrá el turno de los mayores de 80 años -447.207 personas a principios de 2020, según el Instituto Nacional de Estadística-, y del personal sanitario -78.103 personas, según el Idescat-. En la segunda fase, también se contempla vacunar a trabajadores de riesgo, entre los que se encuentran los profesores, ha recordado el conseller de Educación, Josep Bargalló, que esta mañana ha anunciado test masivos en las escuelas a la vuelta de las fiestas de Navidad.
Aunque el Gobierno aún no ha explicado sus planes para la segunda fase, Cabezas calcula que podrían llegar a vacunar entre 2 y 3 millones de personas, y que en verano podría estar vacunado ya el 70% de la población, la cifra para alcanzar la inmunidad del rebaño. La segunda fase de vacunación será más sencilla. “Será más parecida a una campaña de la gripe”, ha dicho cabezas. Habrá puntos para administrar las vacunas en los centros de atención primaria y hospitales.
El proceso de vacunación será progresivo. Cabezas ha recordado que la primera vacuna que llegará será la de Pfizer/Biontech. Está previsto que pase el examen de la Unión Europea el 29 de diciembre y que llegue la víspera de Reyes. Estas vacunas se conservan a menos 75 grados bajo cero. Vendrán de Bruselas por carretera y para almacenarlas ya hay preparados cuatro ultracongeladores del Banco de Sangre y Tejidos capaces de mantener la temperatura a menos de 80 grados bajo cero.
Pocas semanas después, está previsto que llegue la vacuna de Moderna y en tercer lugar, la de Oxfor-AztraZeneca, según los acuerdos de precompra que ha cerrado la Unión Europea. La fórmula de esta vacuna es más clásica: se ha elaborado usando una versión atenuada del virus que provoca el resfriado común de los chimpancés. Y la conservación y el manejo es más sencillo, no requiere de temperaturas tan bajas.
El virus repunta a diez días de Navidad
Como la vacuna no llegará antes de las fiestas navideñas, Vergés ha vuelto a pedir prudencia. Aunque estén permitidas las reuniones de hasta diez personas, no son recomendables. Los últimos datos epidemiológicos no facilitan el avance hacia la fase 2. La Rt sube hasta 0,94, esto quiere decir que por cada 100 infectados se contagian 94 personas nuevas y tras días con más altas que ingresos aumentan las hospitalizaciones. En estos momentos, hay 1.519 personas hospitalizadas, 77 más que ayer, de las que 344 están en la UCI, seis más que en la víspera.
Por ahora, protección civil, mantiene las medidas del primer tramo de reapertura hasta el 27 de diciembre, víspera de los Santos Inocentes. Aunque ha hecho unas pequeñas concesiones para que los centros comerciales puedan abrir hoy con un aforo del 30%, también las pistas de esquí y que los teatros y centros de culto puedan aumentar su capacidad de 500 a 1.000 personas, siempre y cuando se respete el 50% del aforo, si acreditan usar sistemas de ventilación que la garanticen por encima de 12 litros por segundo y persona.
También se han ampliado los límites del confinamiento perimetral de fin de semana: desde octubre, no se permite salir del municipio entre la noche del jueves y la mañana del lunes, pero a partir del viernes el confinamiento será comarcal. Además, el conseller de Interior, Miquel Sàmper, ha avanzado que el Procicat estudia ampliar a toda el área metropolitana de Barcelona la zona de confinamiento de fin de semana. Es una petición que parte del Ayuntamiento de Barcelona y que se está trabajando. “Tiene su coherencia”, ha indicado Sàmper, que ha comparecido junto a Vergés, Cabezas y el responsable de Protección Civil de la Generalitat, Sergio Delgado.
Ampliar el confinamiento del área metropolitana de Barcelona
De hecho, ha sido Delgado el que ha precisado que la propuesta de confinamiento metropolitano ya ha estado en la mesa en varias ocasiones a petición del consistorio barcelonés, con el objetivo de evitar la alta concentración y densidad de personas en determinados puntos de la capital catalana.
Para Delgado, el mayor riesgo llega los días festivos, el 24, 25, 26, 31 de diciembre y el 1 y 6 de enero, porque habrá desplazamientos largos para ver a familiares y se encontrarán burbujas que no conviven habitualmente.
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