Cataluña estudia “ajustar” el plan de Navidad ante el empeoramiento de la transmisión del virus

Cataluña se ha levantado hoy, una semana después del puente de la Purísima, con malas cifras sobre la transmisión del virus: el riesgo de rebrote se ha disparado 38 puntos y se sitúa ya en 219 y la velocidad de transmisión supera el temido 1 y se sitúa en 1,1. Es decir, 100 personas contagian a 110. Los datos desgraciadamente se están complicando”, ha resumido la portavoz del Govern, Meritxell Budó antes de anunciar que la Generalitat estudia “ajustar” el plan de Navidad dependiendo de la evolución de la pandemia. Una decisión que se tomará en los “dos o tres próximos días”, alrededor del fin de semana.

“Habrá Navidad, eso seguro, pero en función de los datos tendremos que tomar unas medidas u otras”, ha señalado la dirigente en rueda de prensa tras pedir “prudencia” ante la evolución de un posible repunte del coronavirus. “Hay que confirmar si se produce o no el cambio de tendencia”, ha pedido Budó al respecto.

Cabe recordar que el plan previsto por la Generalitat incluye dos grandes novedades respecto a la situación actual: el toque de queda se alargará y empezará a las 1.30 horas la noche de Navidad (del 24 al 25) y en Fin de Año, mientras que el día 5 de enero comenzará a las 23 horas; y se permitirán reuniones de hasta 10 personas. Ahora, un gabinete de crisis estudiará los datos y el crecimiento de la transmisión del virus registrado en las últimas horas para analizar si es necesario “ajustar” alguna de estas medidas.

Según el diagnóstico de la portavoz del Govern, el empeoramiento actual de la pandemia puede deberse al “incremento de la movilidad” registrado el fin de semana anterior durante el puente de la Purísima, hace prácticamente diez días. “Todos vimos las imágenes” ha apuntado sobre las aglomeraciones en ejes comerciales y el aumento del tráfico para salir y entrar del área metropolitana pese a las restricciones vigentes.