Cataluña

Illa impulsa un “gobierno en la sombra” para hacer oposición a la Generalitat

Estará compuesto por 15 consellers y tendrá como objetivo proyectarse como alternativa y “fiscalizar” al ejecutivo de Aragonès

Salvador Illa, vencedor de las elecciones catalanas del pasado 14 de febrero, se ha quedado finalmente en la oposición tras intentar su investidura, aunque no se va a quedar de brazos cruzados. El líder socialista ha impulsado un “gobierno en la sombra” para proyectarse como alternativa y hacer oposición y una “fiscalización crítica” al ejecutivo catalán presidido por Pere Aragonès, una idea de tradición anglosajona (shadow cabinet) que importó Pasqual Maragall tras quedarse a las puertas de la presidencia de la Generalitat en 1999.

Este “Gobierno alternativo de Cataluña”, tal y como lo bautizado Illa en un acto celebrado en el Palau Requesens situado al lado del Palau de la Generalitat, estará compuesto por 15 consellers, dos comisiones y un secretario general, además de un consejo técnico. Illa ha querido dejar claro que en ningún caso este equipo hará una oposición “obstruccionista” ya que está dispuesto a llegar a grandes pactos, aunque sí serán “contundentes” porque advierten de que el nuevo Govern nace “fracasado”.

En este sentido, ha citado cuatro grandes pactos que está dispuesto a ofrecer a Aragonès: la superación de la pandemia; la distribución de los fondos europeos; un acuerdo a favor del pluralismo que incluya una nueva Ley electoral (la actual beneficia mucho a los independentistas porque sobrerrepresenta a las zonas rurales) y una refundación de los medios de comunicación públicos; y, una renovación de los altos cargos designados por el Parlament.

Asimismo, según ha explicado, su acción política estará centrada tanto en Cataluña, como en España y Europa. En este sentido, en el interior de la autonomía se dedicará a combatir desigualdades, fortalecer los servicios públicos y recuperar el talento que se ha dejado escapar; con España tendrá una relación exigente, dialogante y leal con el Gobierno y tratará de recuperar el papel de impulso de Cataluña, cooperando con resto de autonomías con lealtad para que “Cataluña vuelva a ser admirada en España”; y hacia Europa, reafirmará el “europeísmo y la recuperación del prestigio” de la autonomía.

Finalmente, también ha urgido a dos iniciativas: la ampliación del Aeropuerto de El Prat, que ha suscitado una gran división política en Cataluña porque el PSC y JxCat están a favor y Podemos, en contra, mientras que Esquerra evita posicionarse; y, la puesta en marcha de la mesa de partidos catalanes para abordar la crisis política internamente, sin fiarlo todo a la mesa entre Gobierno y Generalitat.

Illa ha empleado un tono conciliador con el Govern y ha apostado por que las diferencias no impidan “trabajar en las coincidencias y en puntos de encuentro” para buscar “sinergias” que generen prosperidad.

Composición

El “gobierno en la sombra” estará compuesto por Illa como president y Alícia Romero como portavoz y consellera de Economia. Jordi Terradas estará en Infraestructuras; Pol Gibert en Trabajo; Raül Moreno, en Asuntos Sociales; Òscar Ordeig, en Industria; Gemma Lienas, en Igualdad; Esther Niubó, en Educación; Rosa Maria Ibarra, en Agricultura; Silvia Paneque, en Transición Ecológica; Assumpta Escarp, en Salud; Ramon Espadaler, en Seguridad; Rocío García, en Cultura; Rubén Viñuales, en Justicia; María Moreta, en Municipal; y, David Pérez, en Transparencia.

Asimismo, el Comisionado de presidencia para el impulso federal, el memorial democrático y la Ley electoral será Ferran Pedret y la Comisionada de presidencia para la Cataluña de 2050, el desarrollo sostenible y la lucha contra la desigualdad será la vicepresidenta del Parlament, Eva Granados. La secretaria del Govern será Mireya Fuente.