Bullying

Piden investigar más los abusos en el Institut del Teatre

El Síndic de Greuges alerta que “es mucho más amplio de lo que se ha presentado hasta ahora”

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, flanqueado por la Adjunta para la defensa de los derechos de los niños y los adolescentes, María Jesús Larios (d) y la asesora que ha investigado el caso del Institut del Teatre, Judit Sartorio (i) SÍNDIC DE GREUGES
El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, flanqueado por la Adjunta para la defensa de los derechos de los niños y los adolescentes, María Jesús Larios (d) y la asesora que ha investigado el caso del Institut del Teatre, Judit Sartorio (i) SÍNDIC DE GREUGESSÍNDIC DE GREUGESSÍNDIC DE GREUGES

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha pedido este jueves seguir investigando de forma exhaustiva los casos de presunto abuso en el Institut del Teatre para abarcar a alumnos y profesores que ya no estén en el centro: “Es mucho más amplio de lo que se ha presentado hasta ahora”.

En una rueda de prensa para presentar la resolución de su actuación de oficio sobre este caso, Ribó ha valorado positivamente algunas medidas que se han tomado, como la apertura de expedientes disciplinarios a tres docentes y el traslado de un caso a Fiscalía, pero ha pedido darle un “alcance mucho más amplio” en el tiempo y en las categorías de abuso.

“Toda medida de reparación económica y moral que se apunta por parte del Institut debe adecuarse a esta dimensión”, ha asegurado Ribó, y la asesora de la institución que ha llevado el caso, Judit Sartorio, ha apuntado que la administración tiene el registro de todo el alumnado.

En este sentido, Sartorio ha apuntado que “no tiene sentido” que las personas que ya no están en la institución no entren en la investigación y ha apuntado que la administración tiene el registro de todo el alumnado.

La asesora también ha destacado la importancia de ambos tipos de reparación: la económica, que no debe descartarse en este asunto porque la prevé la normativa, y la moral, para que la víctima “pueda ver compensado el daño que ha sufrido”, incluso en el plano psicológico.

Ha alertado que el miedo a denunciar casos del pasado “es evidente que puede existir” porque las víctimas pueden necesitar tiempo para reunir la capacidad de afrontar los hechos, lo que no quiere decir, ha añadido, que no se deba promover que afloren todos los casos.

Ribó ha enumerado las recomendaciones que emite su institución tras estudiar el caso: además de que se promueva esta investigación “exhaustiva”, ha propuesto mejorar los procesos de abordaje de estos casos, establecer un código de buenas prácticas y asegurar la formación al profesorado, revisar los mecanismos de participación y considerar dichas medidas de reparación.

El Síndic también ha criticado la actitud de las administraciones mientras se estaban produciendo los presuntos abusos: ha constatado “carencias” en la actuación del Institut para proteger a su alumnado de situaciones de abuso y acoso.

Además, ha dicho que se ha incumplido el deber de actuar de oficio, con la debida diligencia, para detectar cualquier forma de maltrato, en lo que ha calificado de “forma de violencia institucional”.

Por último, ha lamentado que la Diputación de Barcelona, de quien depende el Institut del Teatre, no haya contestado a su informe ni a las recomendaciones, mientras que el Consorci d’Educació de Barcelona sí lo ha hecho, considerándolas “muy oportunas y asumiéndolas plenamente”.

Este mes de mayo se supo que el Institut del Teatre de Barcelona abrirá finalmente expedientes disciplinarios a tres docentes, uno de ellos por indicios de acoso sexual y dos por conductas inapropiadas en el aula, según informó la institución en un comunicado, difundido por la agencia Efe, en el que no se especifican los nombres de los profesores.

El centro tomó esta decisión después de recibir el informe de la Comisión de Prevención e Investigación de Acosos Sexuales, con las conclusiones de la investigación que ha realizado a raíz de las diez instancias presentadas por diversos alumnos y ex alumnos. Estas diez instancias, recibidas entre el 22 de febrero y el 14 de mayo, hacen referencia a cinco profesores que están en plantilla y a otros ocho jubilados.

La comisión, que sólo investiga posibles casos de acoso sexual denunciados por alumnos o ex alumnos que haga como máximo un año que han dejado de estar vinculados con el Institut, ha centrado la investigación en los hechos que hacen referencia a dos profesores y ha determinado que hay indicios de acoso sexual sólo en uno de los casos. El Institut del Teatre informará al Ministerio Fiscal sobre el caso de este docente, le abrirá un expediente disciplinario y le aplicará, “con la máxima celeridad”, la sanción que corresponda, que en función de la gravedad de los hechos puede suponer su despido.

Sobre la segunda investigación, que según fuentes del caso sería la que corresponde al director de teatro Joan Ollé, la comisión ha concluido que no hay indicios de acoso sexual, pero sí de conductas inapropiadas en el aula y, en consecuencia, también se le abrirá un expediente disciplinario y se determinará la sanción que corresponda. El tercer expediente se ha abierto a un docente por “una falta no leve por práctica docente invasiva”, según el Institut.

Mientras se resuelven estos expedientes, la institución mantiene las medidas cautelares que aplica desde el inicio de las investigaciones a estas tres personas, que siguen realizando trabajos vinculados con su puesto de trabajo, pero apartados de las aulas. Respecto a los ocho profesores jubilados, el Institut analizará la información para valorar si es posible tomar acciones judiciales y ofrecerá acompañamiento y apoyo psicológico a las personas afectadas que opten por presentar una demanda por esta vía.

La polémica rodea al Institut desde que alumnos y exalumnos denunciaron a través de las redes sociales varios casos de acoso sexual y abuso de poder por parte de profesores y Ollé fuera apartado de la docencia.