Quinta ola

Los contagios entre el personal sanitario dispara las alarmas en Cataluña

La Generalitat implementará nuevas restricciones esta semana para limitar la propagación del virus

La normalidad en Cataluña tendrá que esperar. La vacunación dio un cierto respiro, pero el número de contagios se ha disparado y ya tiene su reflejo, otra vez, en los ingresos hospitalarios. Así, entre el 1 y el 7 de julio, Salud registró, mediante pruebas PCR o tests de antígenos, hasta 40.430 casos. Esta cifra, que no se había registrado nunca desde el principio de la pandemia, significa que cada día, de promedio, hay 5.775 contagios. Dicho de otro modo, ya hay 876 personas ingresadas con Covid-19 en los hospitales, sólo ayer, 88 más.

Ante esta situación, el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, y el president de la Generalitat, Pere Aragonès, han comparecido para anunciar que entre mañana y pasado “se tomarán nuevas medidas para limitar la propagación del virus”. “No estamos en un momento bueno, al contrario, estamos en un momento complicado”, ha señalado Aragonès.

Argimon, por su parte, ha expresado preocupación por el incremento de profesionales del sector sanitario contagiados de coronavirus y ha asegurado que desde la Conselleria se están buscando medidas para protegerles, y que se adoptarían a partir del 19 de julio. Ha detallado que estas mejoras de las condiciones para sanitarios pasan por reforzar la asistencia primaria y por un replanteamiento “radical” del sistema de salud mental que incluya un plan de prevención del suicidio.

Por otro lado, ha dicho que espera que la estrategia de vacunación permita alcanzar la inmunidad de grupo y superar la pandemia en otoño de este mismo año, aunque ha avisado de que los virus son imprevisibles y que la salida de la pandemia también depende de la responsabilidad colectiva: “Está en nuestras manos, ahora más que nunca”.

Sin embargo, ha avisado de que este otoño será crítico para combatir al Covid-19 porque también se tendrá que hacer frente a otros virus propios de ese periodo estacional, como el respiratorio sincitial y la gripe y la carga asistencial que conllevan, además de “todo el cansancio acumulado” derivado de la pandemia.