Govern dividido

Aragonès cierra in extremis un acuerdo con los Comunes para los presupuestos

Esquerra facilitará las cuentas en Barcelona y Podemos en el Parlament. El president admite a regañadientes el fracaso del independentismo tras el no de la CUP y el choque con Junts

El president Pere Aragonès (ERC) ha anunciado a su gabinete este lunes a primera hora de la mañana un acuerdo con los Comunes, la facción que cobija a Podemos en Cataluña, para los presupuestos de la Generalitat. Un pacto sobre la bocina, justo antes de que este lunes el Parlament debata y vote las enmiendas a la totalidad y después de un nuevo sainete del independentismo, más dividido que nunca en este inicio de legislatura. Eso sí, pese a las algaradas y las críticas de Junts a ERC, los posconvergentes votarán a favor de la tramitación. El objetivo es aprobar las cuentas para 2022 el 23 diciembre para que así entren en vigor el 1 de enero.

Todo después de que la Generalitat haya informado que en la reunión del Consell Executiu de este lunes a las 8:30 horas -convocada de forma extraordinaria anoche- Aragonès ha trasladado al Ejecutivo catalán el acuerdo al margen de la CUP. Un comunicado emitido por la oficina del president en nombre de todo el Govern pese a las fuertes discrepancias abiertas con Junts por la alianza de ERC con los morados.

Por su parte, los Comunes han reunido a lo largo de esta mañana a su Ejecutiva para ratificarlo y han retirado la enmienda a la totalidad presentada. Una de las demandas de los morados era un pacto global a tres bandas: avanzar en la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) con ERC, atar los de la Generalitat y los del Ayuntamiento de Barcelona.

De hecho, ha trascendido que el pacto cerrado incluye el apoyo de los republicanos a las cuentas de Ada Colau en el Consistorio. “Esquerra de Barcelona no puede quedar al margen de la situación generada por los presupuestos de la Generalitat”, ha señalado el republicano Ernest Maragall. De esta manera, ERC ha cedido a la exigencia de los Comunes de intercambiar apoyos en Barcelona y Cataluña, aunque Maragall se ha mostrado crítico porque no comparte las cuentas del Ayuntamiento. “La política del mercadeo no es la nuestra”, ha señalado el líder de Esquerra en Barcelona. “Asumimos la contradicción e incoherencia entre lo que votamos la semana pasada (en contra) y lo que votaremos (a favor), lo hacemos responsablemente”, ha añadido.

El president admite a regañadientes el fracaso independentista

Luego, el propio president ha comparecido en el Palau de la Generalitat a mediodía para dar explicaciones de lo ocurrido en los últimos días y ha admitido a regañadientes el fracaso de la mayoría independentista. En este sentido, ha pedido a sus socios de investidura -Junts y la CUP- “seguir trabajando” juntos, aunque ha reconocido que revisará el pacto con los antisistema después de que hayan mantenido su veto a las cuentas.

“El acuerdo de investidura debía permitir esta cadena de confianza para aprobar el presupuesto. Esto no ha ocurrido”, ha asegurado Aragonès, quien se ha emplazado a hablar con la CUP, ha negado en varias ocasiones que esté rota la mayoría independentista y ha tendido la mano a los antisistema para el resto de legislatura.

Eso sí y preguntado en varias ocasiones por la cuestión de confianza a la que debía someterse en 2023 según el acuerdo de investidura, el president ha omitido el asunto. “La mano tendida continúa”, “en ningún momento damos nada por roto” pero “tenemos que ver cómo continuamos”, ha resumido Aragonès en varios momentos de la comparecencia.

En este sentido, queda por ver también qué posición acaba tomando Junts teniendo en cuenta que los presupuestos dependen de Economía, una cartera bajo su control y en manos de Jaume Giró. Y es que en las últimas horas los posconvergentes se han desvinculado de las negociaciones con los comunes para las cuentas entre críticas a Esquerra.

Este domingo mismo y en pleno “sprint” para lograr atar los presupuestos tras el no de la CUP, Junts se ausentó de la reunión en el Palau de la Generalitat con los morados y convocó una comparecencia pública para advertir de que cierran la puerta a cualquier cesión en materia presupuestaria al partido de Ada Colau y Jéssica Albiach.

El acuerdo se ha producido poco más de una hora antes de que finalice el plazo para retirar las enmiendas a la totalidad a las cuentas, por lo que este lunes todo apunta que los presupuestos superarán la primera tramitación en el Parlament.