El Govern desafía a la comunidad educativa y adelantará de forma unilateral el inicio de curso

El Govern de la Generalitat se ha metido en una especie de callejón de difícil salida al anunciar de forma unilateral y sin pactarlo con nadie un calendario escolar que incluye una importante novedad de cara al nuevo curso: la vuelta a las aulas será el 5 de septiembre en escuelas y el 7 en institutos, un adelanto que ha enervado a la comunidad educativa. Los profesores y sindicatos claman contra la medida, denuncian la falta de tiempo y la improvisación con la que se pretende aplicar y han convocado una insólita huelga de cinco días en señal de protesta. Pese a ello, el Ejecutivo se mantiene firme y no dará marcha atrás: sus planes se aplicarán sí o así.

Asíse ha mantenido el consejero de Educación, Josep González-Cambray (Esquerra), en el punto de mira de sindicatos y organizaciones docentes. Pese a acumular peticiones de dimisión y a ser uno de los consejeros más cuestionados del Govern -también está en la polémica por sus amagos de desobediencia ante la sentencia del 25% de castellano- Cambray sigue con el órdago y cuenta con el respaldo del propio president Aragonès.

Y es que el presidente de la Generalitat ha cerrado este miércoles la puerta a dar marcha atrás en la decisión del Govern de adelantar el inicio del curso escolar, pese a los reproches que le han dirigido el PSC y los comunes por su actitud ante la comunidad educativa.

En la sesión de control al presidente catalán en el pleno del Parlament, la líder del grupo de En Comú Podem, Jéssica Albiach, ha recriminado al Govern que quiera “imponer de manera unilateral” a la comunidad educativa estas “medidas de gran calado”.

Albiach ha acusado al Govern de “falta de humildad, falta de diálogo e improvisación” con este cambio en el calendario escolar y lo ha instado a “rectificar, sentarse a negociar y no menospreciar a los sindicatos y la comunidad educativa”.

También el primer secretario del PSC y jefe de la oposición, Salvador Illa, ha emplazado al Govern a “explicarse y escuchar”, ya que si tiene una “huelga convocada” en el ámbito educativo es porque “no se ha explicado ni ha escuchado suficientemente bien”.

En su réplica a Albiach, Aragonès ha sido tajante a la hora de descartar un cambio de planes con respecto al nuevo calendario escolar: “No retiraremos la medida, es una buena medida”.

Por otro lado, la Subfederación de Educación de la Federació de Cristians de Catalunya (FCC-Educació) ha pedido la dimisión del conseller de Educación de la Generalitat, Josep Gonzàlez-Cambray, por haber anunciado el retiro de los conciertos a las escuelas que separan a sus alumnos por sexo -parte de las cuales han anunciado que dejarán de hacerlo el próximo curso-.

En un comunicado este miércoles, la FCC-Educació ha apuntado que la diferenciación se produce en otros ámbitos educativos financiados por la Generalitat, como los deportivos, y ha animado a las familias a movilizarse para “defender el derecho que tienen a decidir con libertad el tipo de educación que quieren para sus hijos según sus convicciones”.