El PP de Cataluña, en tensión por un escaño: Serrano se da de baja, pero coge el acta de diputado

Mientras el PP atraviesa una crisis sin precedentes a nivel nacional con la pugna entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso que va a acabar con un cambio de líder, los populares en Cataluña siguen sin conseguir estabilidad del todo. En las últimas horas, han sufrido un terremoto después de que Daniel Serrano haya heredado el acta de diputado de Eva Parera en contra de la voluntad de la dirección del partido que lidera Alejandro Fernández.

Serrano está imputado por un presunto delito de agresión sexual y ha optado por coger el escaño de diputado como parte también de su estrategia de defensa, según sospechan algunas voces consultadas en el partido, ya que, con este movimiento, pasaría a estar aforado y es el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) quien asume la causa en detrimento del juzgado de instrucción que investigaba ahora el caso. En el entorno de Serrano rechazan esa explicación dada en el PP y aseguran que adquiere el acta de diputado para que la querella interpuesta por la supuesta víctima no se convierta en un “instrumento útil para destrozar” la vida de un político.

Serrano ha cogido el escaño, pero se ha dado de baja del partido (temporalmente, según puntualizan en su entorno). Según fuentes populares, ha tomado esta decisión de forma “unilateral” y desde la dirección del partido tampoco han podido hacer nada pese a mostrar su rechazo porque está “en su derecho” tanto de coger el acta como de darse de baja. Y es que la Junta Electoral Central expide el acta automáticamente al siguiente de la lista cuando hay una baja y correspondía a Serrano, exsecretario general del PP. Los consultados creen que si la causa pasa al TSJC, Serrano prevé que le permitirá “agilizar” la resolución del caso porque el juzgado de instrucción va “más lento”. También estiman que el propio TSJC es “más garantista” a la hora de resolver porque hay tres magistrados. “Sin duda, cree que el TSJC archivará su caso mucho más pronto”, señalan algunas voces.

Lo cierto es que este movimiento altera los planes de la dirección del partido que, tras llegar a un acuerdo con Parera para que renunciara al escaño, se encuentran con que ahora se lo queda Serrano contra su voluntad. La pretensión de los populares era que lo recogiera Eduardo Bolaños, muy cercano a Fernández. Los populares, que lograron tres escaños tras las elecciones de hace un año, se quedarán con dos (Alejandro Fernández y Lorena Roldán), mientras que el tercero recaerá en Serrano. Mientras no haya sentencia judicial, los populares sostienen que, a efectos parlamentarios, permanecerán Fernández y Roldán en el grupo. Serrano quedará asignado en alguna comisión porque así lo dicta el reglamento, pero serán “menores”. “Él tampoco tiene intención de hablar en plenos y debates relevantes en su situación”, señalan en la sala de máquinas del partido, que precisan que estará sometido a la disciplina que marque el PP porque lidera el grupo mixto.

En el entorno de Serrano, sin embargo, explican que el único objetivo de que coja el acta es “no estimular en el futuro actitudes de imputación de hechos falsos con la única intención de destrozarle la vida a las personas”, en alusión a la mujer que interpuso una querella contra Serrano por un presunto delito de agresión sexual. “No puede tener premio”, señalan y recuerdan, por ejemplo, el caso del diputado de JxCat, Eduard Pujol, que ha quedado absuelto tras un caso similar, pero ha sufrido un castigo tanto social (por la imagen que le queda) como político (porque ha tenido que renunciar a sus cargos). En ningún caso, dicen, es por una cuestión de estrategia jurídica porque, según exponen, no pueden prever que si la causa se traslada al TSJC se resuelva con más agilidad. En cualquier caso, también precisan que Serrano se da de baja temporalmente del partido para “evitar que esta circunstancia permita atacarle a él y al partido” y su intención es volver a los populares cuando se aclare.