Colau acaba con las terrazas covid en seis zonas de Barcelona

La pandemia consiguió tras su estallido cambiar muchos de los elementos clásicos. En las ciudades, por ejemplo, algunos espacios se modificaron por completo para tratar de paliar los efectos que el virus provocó tanto en el plano económico como sanitario.

Tras varios meses de pandemia el gobierno de Ada Colau trató de implementar algunos cambios de gran calado en la Ciudad Condal que todavía hoy, más de dos años después, continúan, como medidas provisionales. Aun así, la alcaldesa y su gobierno han tomado la decisión de acabar con una de las medidas más conocidas tras el estallido del virus en algunas zonas de Barcelona, la ampliación de terrazas.

Así las cosas, el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado hoy que no renovará las licencias a las terrazas que se ampliaron de forma extraordinaria para la restauración. Este cese se efectuará en seis zonas “especialmente saturadas” del distrito del Eixample, según el Consistorio, como ha anunciado el concejal del mismo distrito, Pau González.

Ante la apertura de muchas fronteras y el inicio de la época estival González ha dado por terminada la excepcionalidad provocada por la pandemia. Además, ha expuesto que hay que “volver a poner en solfa el espacio público de la ciudad” especialmente en el Eixmaple que representa un 30% de la restauración de Barcelona, según los datos ofrecidos por el gobierno de Colau.

El Ayuntamiento, además, ha expuesto informes técnicos elaborados por el distrito que junto con la Ordenanza de Terrazas, “justifican” las zonas saturadas donde se denegarán las solicitudes para regularizar licencias de terraza otorgadas por la pandemia. Estas incluyen las calles Parlament, Muntaner, el ámbito de Enric Granados-Aribau, la Rambla de Catalunya, el paseo de Sant Joan y la avenida Gaudí.

Unas 144 licencias denegadas

De las 170 licencias otorgadas durante este periodo, se ha denegado la consolidación a 144 negocios que habían pedido mantener la ampliación, cada una de ellas cuenta con un número variable de mesas y sillas, y “la inmensa mayoría eran ampliaciones de locales que ya tenían una terraza”, ha asegurado el edil, mientras que las otras 30 ya no lo han solicitado.

El Ayuntamiento, además, ha expuesto que para los informes técnicos se han tenido en cuenta parámetros como la densidad de usos de restauración en un determinado ámbito, el espacio que ocupan las terrazas con sus mesas y sillas respecto a la superficie de la acera junto al impacto de las quejas y denuncias recibidas por ruidos o molestias en un ámbito respecto al conjunto del distrito.

Gracias a estos parámetros el Consistorio ha decidido denegar estas licencias excepcionales y volver a dejar las calles como antes de la pandemia. Para ello, se espera eliminar también los bloques de cemento amarillos instalados en algunas zonas, popularmente llamados “new jerseys” por unos nuevos módulos donde haya licencia vigente.

Recurso contra la medida

Algunos restauradores vieron durante la pandemia como esta medida era la única forma de salvar sus negocios. Así, muchos lograron sobrevivir ofreciendo servicio al exterior con un mayor número de mesas y sillas que permitiese recaudar compensando las grandes pérdidas que sufrió durante la época más dura el sector de la restauración.

Ante esta medida tomada por el Ayuntamiento podria darse una ola de quejas. Por este motivo, González también ha planteado la posibilidad de que algún negocio recurra la denegación de dichas licencias y que no todo el trámite depende del Ayuntamiento, algo que podría retrasar la retirada y entrada en vigor de esta media.

Pese a ello, desde el Consistorio se quiere agilizar y “ordenar” las calzadas cuanto antes para así, según el gobierno de Colau, mejorar la convivencia. Ante esto, incluso, el Ayuntamiento ha anunciado que se reunirán con vecinos y restauradores para valorar medidas que acaben concretándose en un plan específico de trabajo para esta zona, entre las que estudian la reducción horaria de terrazas, un refuerzo de la limpieza, o priorizar ayudas a la rehabilitación de estos inmuebles para mejorar el aislamiento.