Sucesos

Un detenido por un secuestro en un céntrico hotel de Barcelona

Los Mossos localizaron en el establecimiento a una persona amordazada y atada de manos

Los Mossos investigan los hechos
Los Mossos investigan los hechosGoogle

El hotel Acta Atrium Palace de Barcelona, situado en la Gran Via, donde este jueves por la noche los Mossos d’Esquadra liberaron a una persona que estaba “amordazada y atada de manos” en una de las habitaciones recuperó la normalidad.

El teléfono de emergencias 112 recibió un aviso sobre las 21 horas que informaba de que “podría haber una persona retenida”, y la policía catalana desplegó un amplio dispositivo para revisar habitación por habitación el establecimiento.

Los agentes detuvieron a una persona presuntamente relacionada con el secuestro, y de madrugada los huéspedes del hotel han podido volver a sus habitaciones tras descartar que hubiera más personas implicadas escondidas en el establecimiento, aunque la investigación sigue abierta.

El padre de una familia de Brasil alojado en el hotel ha explicado a los medios que en el momento de los hechos acababan de llegar a recepción y se estaban registrando, momento en el que vieron mucho “barullo” y agentes de la policía armados entrando por la puerta principal.

Los agentes les hicieron salir del hotel, mientras realizaron un perímetro de seguridad alrededor de la puerta principal para evitar que nadie entrara, hasta que al cabo de dos horas pudieron acceder a su habitación.

Una huésped procedente de Iraq ha manifestado que pasó “mucho miedo al escuchar gritos y disparos” desde su habitación, y que la policía registró su estancia de forma minuciosa.

“Muchos agentes entraron en la habitación y miraron esquina por esquina toda la habitación durante 15 minutos, incluso miraron debajo de las alfombras, y nos dijeron que había personas peligrosas dentro del hotel y que no saliéramos de la habitación”, ha añadido.

Un matrimonio de Canadá también hospedado en el establecimiento ha explicado que sobre las 21 horas “llamaron a la puerta con gritos” y, al abrir, se encontraron a agentes de la policía uniformados y armados que registraron su habitación durante unos 20 minutos y les pidieron los pasaportes.

“Creo que siempre vamos a recordar estas vacaciones, están siendo memorables y emocionantes”, ha ironizado el hombre.

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