Agresiones sexuales
Una menor denuncia una violación en el interior de la polémica discoteca Waka de Sabadell
“Me cogieron de la cabeza cuando estaba en la tarima”, recuerda la joven
Una menor ha denunciado haber sido violada en el interior de una discoteca de Sabadell la madrugada de este domingo, han informado los Mossos d’Esquadra. Este local nocturno ha sufrido muchísimas quejas por agresiones, racismo y vejaciones.
La policía catalana ha detallado que recibieron el aviso de madrugada y acudieron al establecimiento, donde asistieron a la víctima.
También ha explicado que se están realizando trabajos de investigación y que este martes a primera hora no constan detenidos. Es la misma discoteca donde un joven fue apuñalado a la salida del recinto el noviembre pasado.
No es la primera vez que ocurre una agresión sexual en el recinto. Los mossos detuvieron en febrero a un chico, menor de edad, por otra violación que también sucedió dentro de la discoteca. En marzo, dos jóvenes fueron pillados al momento por los mossos y acusados de agresión sexual fuera de la discoteca. Los dos entraron en prisión.
La misma discoteca ha protagonizado varios conflictos a lo largo del último año 2021. En noviembre pasado se viralizó el vídeo donde un joven denunciaba una agresión por parte de los porteros por motivos racistas. Ese mismo mes, un joven fue apuñalado a la salida de la discoteca. Varios jóvenes participaron en diciembre en una macropelea en el exterior de la discoteca que acabó con tres heridos. Protestaban por el comportamiento presuntamente xenófobo de los vigilantes de seguridad. Hubo centenares de asistentes a la protesta, la gota que colmó el vaso después de tantísimas qiejas y denuncias.
Los Mossos analizarán las cámaras de seguridad por si pueden identificar al agresor.
Hzce poco, cerca de un millar de personas se congregaron un sábado a las 23 horas a las puertas de la discoteca Waka de Sabadell, convocadas a través de las redes sociales, para protestar por los incidentes racistas protagonizados por los porteros del local en una concentración que terminó con lanzamiento de bengalas, piedras, vallas y botellas contra el recinto y el personal, así como con la policía.
Una treintena de personas acabaron irrumpiendo en el local, donde causaron daños. Los disturbios, que se produjeron poco más de un mes después de que los porteros de la discoteca apalizaran a un joven colombiano a finales de octubre, se saldaron con un controlador de acceso herido por una pedrada en un ojo y dos agentes de los mossos heridos leves también por lanzamiento de objetos.
Los mossos d’esquadra, que cifran en 1000 las personas que se congregaron frente a la discoteca, ya han abierto una investigación por los graves disturbios. El Ayuntamiento de Sant Quirze del Vallès ha convocado este domingo una Junta de Portavoces para estudiar lo sucedido y, en una entrevista en el 3/24, la alcaldesa Elisabet Oliveras, ha instado a la Generalitat a hacerse cargo de la situación para acabar con los “delitos de odio”.
Oliveras ha explicado que el Ayuntamiento está estudiando “poner en marcha un punto lila en la zona contra las violencias y el acoso” pero que primero quiere “pacificar” ese área, en el que cada fin de semana se producen altercados. Según la alcaldesa, el consistorio ya no puede ir más allá en este caso y esta mañana se ha reunido con la policía local para “programar” la actuación de esta semana de cara a “controlar la situación”.
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