El Parlament apunta a Junts y abre el proceso para multar a Dalmases

El Parlament apunta a Junts y abre el proceso para investigar y sancionar a Francesc de Dalmases, mano derecha de Laura Borràs en el partido y diputado en el punto de mira por abroncar a una periodista de TV3. Un caso que se va complicando por momentos para el entorno de la ex presidenta de la Cámara, con un goteo incesante de nuevos testimonios que cargan contra Dalmases en los medios y un profundo malestar en el seno posconvergente.

Ayer, la comisión del Estatuto del Diputado del Parlament confirmó que abre una investigación al diputado por una posible vulneración del Código de Conducta de la Cámara al intimidar a la subdirectora del programa «Faqs» de la cadena pública en verano.

Al proceso que inicia la comisión se incorporará el informe elaborado por el director de TV3 sobre los hechos, así como el diario de sesiones de la cámara con la comparecencia de Dalmases en la comisión de control a la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), el ente que gestiona los medios dependientes de la Generalitat.

Una vez la comisión haya elaborado el informe en el que se describirán los hechos, este se elevará a la Mesa del Parlament para que decida, llegado el caso, si sanciona o no a Dalmases por vulnerar el Código de Conducta. En el órgano rector de la Cámara, Junts está en minoría al contar con sólo un dirigente (Aurora Madaula) ante los dos del PSC y ERC, y otro de la CUP. La multa puede ascender hasta los 12.000 euros o incluso llegar a la suspensión como diputado, nunca a su expulsión de la Cámara. Se espera, en todo caso, que el informe de la comisión no se demore más de diez días.

Como parte del proceso de investigación, la comisión ha ofrecido a Dalmases que acuda a comparecer, en un procedimiento reservado y que puede llevarse a cabo por escrito, sin necesidad de acudir a la cámara.

El dirigente ha remitido un escrito a la comisión en el que admite de forma implícita los hechos y en el que da a entender que no comparecerá de manera pública, según confirmaron fuentes parlamentarias recogidas por Efe.

El caso, con Borràs de nuevo en el ojo del huracán, ha explotado y ha fracturado de nuevo a los posconvergentes, divididos entre los que defienden que Dalmases debería dejar su escaño y ser expulsado del partido, y los que ven una mano negra para descabalgar también a la ex presidenta del Parlament. El dirigente se limitó a dimitir como vicepresidente de Junts, pero conserva su acta y puesto en la formación posconvergente.

De hecho, lo que ocurrió ayer ejemplifica las enormes turbulencias que causa el asunto Dalmases: el diputado de Junts y presidente de la Comisión del Estatuto del Diputado, Jaume Alonso Cuevillas –dirigente del círculo de confianza de Borràs– informó al resto de las «dudas» procedimentales que a su juicio suscita el Código de Conducta. «Desde el punto de vista jurídico es una chapuza», criticó en una entrevista a primera hora de la mañana en TV3, un intento de desacreditar el procedimiento antes de que la propia Cámara lo aprobara. También explicó que el dirigente estará de baja una «buena temporada» por «riesgo de infarto».

La polémica se remonta a julio de este año, cuando Francesc de Dalmases abroncó a la mencionada periodista de la cadena tras una entrevista crítica a la ex presidenta de la Cámara. Borràs no se sintió cómoda en la entrevista y así lo dejó claro ante las cámaras. Al finalizar y ya fuera del plató, Dalmases agarró por la muñeca a la subdirectora del espacio, le gritó «mala profesional» y tildó el espacio nocturno de TV3 de «programa de mierda», una controversia que sentó especialmente mal en las filas posconvergentes.

Entonces y tras salir a la luz pública, Junts inició una investigación interna que concluyó que el político intimidó a la profesional de la televisión pública.

Al margen de lo acabe ocurriendo en el Parlament, sin Francesc de Dalmases Laura Borràs pierde una pieza importante en la cúpula de Junts tras repartirse el poder con el secretario general del partido, Jordi Turull, este verano.