Política

Aragonès mueve ficha para atar sus últimos Presupuestos

Son claves para el republicano si quiere cumplir con su empeño de agotar la legislatura

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en el pleno del Parlament junto a Salvador Illa (PSC) esta semana
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en el pleno del Parlament junto a Salvador Illa (PSC) esta semanaAgencia EFE

Pere Aragonès y su gobierno llevan días haciendo gestos para tratar de pactar los Presupuestos de 2024, los últimos de la legislatura. Unas cuentas clave para el republicano si quiere cumplir con su empeño de agotar el mandato, como así dijo tras el ciclo electoral de este año marcado por los sucesivos revolcones de Esquerra en las urnas.

El Ejecutivo de Aragonès empieza a moverse ahora, cuando quedan seis semanas para que termine el año y después de haber cerrado un acuerdo entre ERC y el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez al margen del pacto con Puigdemont y Junts. Y lo hace tarde, pero de forma abierta: esta semana, el Ejecutivo republicano ha aprobado el techo de gasto no financiero y no finalista para los Presupuestos, que ha fijado en 36.684 millones de euros para el próximo ejercicio. Esta cantidad marca el límite de asignación de los recursos, de acuerdo al escenario de ingresos, al cumplimiento de la normativa de estabilidad presupuestaria y a los criterios del Sistema Europeo de Cuentas (SEC 2010). De hecho, se trata de una estimación que la Generalitat deberá ajustar cuando el Ministerio de Hacienda facilite la previsión de ingresos oficial y la liquidación correspondiente del sistema de financiación.

Sea como fuere, lo cierto es que se trata de un primer marco con el que trabajar, un punto de partida que el presidente y su gabinete quieren utilizar para elaborar su propuesta y trasladarla a los distintos grupos parlamentarios en las próximas semanas. De hecho, este miércoles pasado ya hubo un primer contacto entre el equipo de la consejería de Economía de la Generalitat y una delegación del PSC, mientras que los encuentros con los Comunes son permanentes para hablar de la ejecución de las cuentas actuales.

Sin embargo, los socialistas evitan comprometerse con ERC y se limitan a decir que «estudiarán» el proyecto de presupuestos del Govern para 2024, aunque avisan que «antes» habrá que hacer balance del grado de cumplimiento de las cuentas de este año, con el que los socialistas no están «contentos». «No haremos pasar el carro por delante del caballo. Primero, evaluación del acuerdo de 2023, eso es el caballo. Y después, análisis del Presupuesto de 2024, eso es el carro», explicó Salvador Illa de forma metafórica.

Al respecto, el presidente de la Generalitat contestó que su Ejecutivo cumplirá con el acuerdo de 2023 que firmó con el PSC, lo que asegura que permitirá «afrontar el 2024 con un Presupuesto aprobado al servicio de los ciudadanos».

Entre las cuestiones pendientes que el Ejecutivo de Esquerra aún no ha puesto en marcha sobresale la comisión para abordar la ampliación del aeropuerto de Barcelona, una de las principales exigencias de los socialistas a cambio de dar su visto bueno a las cuentas. Tampoco se ha concretado el plan director para el complejo de ocio del Hard Rock, otra de las peticiones del partido de Salvador Illa.

Cabe recordar que a principios de este año el Govern de ERC consiguió sacar adelante los presupuestos con los votos del PSC y de los Comunes, tras no lograr el apoyo de Junts ni del resto de la oposición.

Ahora, el plan de la Generalitat es reunirse también con los posconvergentes para tratar de lograr su apoyo de cara a los últimos Presupuestos de la legislatura –si ERC agota el mandato, las elecciones están previstas para febrero de 2025– a diferencia de lo que ocurrió a finales de 2022, con la salida de Junts del Govern entonces muy reciente.