Seguridad

Hasta 800 agentes velarán por mantener la normalidad en Fin de Año en Barcelona

El dispositivo previsto para la última noche del año pondrá el foco en la Avenida María Cristina, donde tendrá lugar el tradicional piromusical, en el centro de la ciudad y en las zonas de ocio y prestará especial atención a la prevención de las violencias machistas y sexuales

Destrozos tras los botellones de las Fiestas de la Mercè
Destrozos tras los botellones de las Fiestas de la MercèLa Razón

Tras los últimos incidentes graves acontecidos en el entorno de la Avenida María Cristina de Barcelona en celebraciones señalas, como las dos últimas fiestas de la Mercè, el Ayuntamiento de Barcelona ha reforzado el dispositivo de seguridad de cara a Fin de Año.

Para esa noche señalada, 800 efectivos, 255 de los cuales pertenecen a la Guardia Urbana y un centenar más a los bomberos, y varios drones velarán por la seguridad y buena convivencia en toda la ciudad, con el foco puesto especialmente en la Avenida María Cristina, donde tendrá lugar el piromusical, el evento más importante de la noche, en el que se espera que se concentren hasta 94 mil personas.

En este enclave se establecerán hasta tres coronas de restricciones: la primera de ellas estará ubicada en las Torres Venecianas, donde se situará el control de acceso y en la que se producirán los primeros cortes de tránsito a partir de las 19 horas; a continuación, y de forma progresiva, se irán ampliando esas restricciones, primero hacia la zona mar y, posteriormente, en toda Plaza España.

Al respecto, tal y como señaló Albert Batlle, teniente de alcalde de Seguridad y Prevención, durante la presentación del dispositivo, cabe señalar que “solo se podrá acceder a la calzada central de María Cristina para asistir al piromusical desde las Torres Venecianas, ya que los accesos desde la Avenida Rius i Taulet y la calle Ferrer i Guardia estarán cortados”. Batlle recordó también que “el piromusical es solo una actividad lúdica de unos 30 minutos de duración, que no se prolongará a lo largo de la noche”, como ha podido suceder en otros eventos como las fiestas de la Mercè.

Más allá de estos controles de acceso, para la noche de Fin de Año el dispositivo llevará a cabo una tarea de prevención de la actividad delictiva, para lo que contará con agentes de paisano. Asimismo, se reforzará la vigilancia en lo que se refiere a las violencias machistas y sexuales, con una incremento de la supervisión en los conocidos como itinerarios seguros, con los que se pretende garantizar la seguridad, sobre todo de las mujeres, en su camino hacia el transporte público.

El centro de la ciudad, especialmente Plaza Cataluña y sus alrededores, y las zonas de ocio, como el litoral, Sant Martí y la zona norte, serán los otros dos focos de atención en el contexto de este dispositivo de cara a la noche de Fin de Año, cuyo despliegue se llevará a cabo en colaboración con los Mossos d’Esquadra y con el apoyo de seguridad privada.

En lo relativo a la seguridad viaria, se llevarán a cabo controles de alcoholemia y de drogas en diversos puntos de la ciudad, ya que preocupan especialmente estas actitudes imprudentes al volante puesto que, tal y como comentó el Intendente Mayor de la Guardia Urbana, Pedro Velázquez, “en el mes de diciembre, se han registrado 372 pruebas de alcoholemia positivas y 85 drogotest positivos”. Al respecto, Batlle animó a los barceloneses a hacer uso del transporte público durante la noche de Fin de Año, ya que, como él mismo recordó, “éste estará en funcionamiento 43 horas consecutivas, desde las 5 de la madrugada del día 31 hasta el 1 de enero a las 12 de la noche”.