Las condiciones del PP para la alcaldía de Barcelona: ni independentistas ni Colau

La alcaldía del Ayuntamiento va para largo. El reguero de vetos cruzados puede llegar a enquistarse y que, por lo tanto, Xavier Trias salga escogido alcalde. De momento, ayer, el candidato del PP a la alcaldía, Daniel Sirera, marcó sus propias líneas rojas, ya que, en última instancia, sus votos pueden decidir el futuro alcalde de Barcelona. Por el momento, no quiere ni a Colau ni un gobierno independentista para la ciudad.

Xavier Trias ganó las elecciones con once concejales, lejos de los 21 que dan la mayoría absoluta. Por lo que solo sumaría con el PSC, que sacó diez concejales. El acercamiento entre Junts y ERC, sin embargo, lo aleja de los socialistas, que, a su vez, podrían perder un concejal, que se llevaría Colau, una vez se resuelvan hoy varias anomalías electorales. La distancia entre ambos es de apenas 140 votos. Sirera, eso sí, descarta unirse con Colau para hacer alcalde Collboni: «Con los comunes, ni a tomar un café»

Sirera advirtió a los dos partidos que obtuvieron más concejales que «no voy a dar un cheque en blanco» y remarcó que «tendrán que decidir, si quieren el apoyo del PP, a qué están dispuestos a ceder». En este sentido, avisó: «Un alcalde que se presenta para convertir Barcelona en la capital de una Cataluña independiente que no cuente conmigo, y si alguien quiere ser alcalde para encontrarme con Colau en el gobierno a los dos meses, conmigo que tampoco cuente».

El candidato del PP dice que quiere «condicionar el futuro municipal todos los días del mandato» y por eso afirmó que le gustaría estar en el gobierno municipal. «No he venido a hacer alcalde alguien y pasarme cuatro años mirándomelo de lejos, quiero involucrarme en el gobierno», aseguró, aunque reconoció que «esto no sólo depende de mí».

Sirera ya avisó de que está dispuesto a «escuchar a Trias», pero que decidirá en función del programa y de las propuestas por Barcelona. En esta misma línea, planteó medidas clave en materias como seguridad y empleos, economía, limpieza o movilidad, unas propuestas que presentará a Trias y Collboni para negociar su apoyo a la investidura. Para concretarlos, Sirera tiene previsto reunirse con agentes económicos, sociales, culturales y constitucionalistas.

Desde ERC, mientras, se esfuerzan en justificar cómo, tras ocho años pactando presupuestos y obras con el gobierno de Ada Colau, a las primeras de cambio se han lanzado a los brazos de Junts tras las elecciones. En esta ocasión, han resucitado el episodio de Manuel Valls. EL presidente de ERC, Oriol Junqueras, subrayó ayer que descarta apoyar al candidato del PSC, Jaume Collboni, porque pactó con «la extrema derecha» de Manuel Valls para impedir que Ernest Maragall fuese alcalde, obviando que entonces, como ahora, ERC se empeñó en ir de la mano de Junts.

Junqueras aseguró que existen muchos argumentos para rechazar que el partido socialista lidere instituciones catalanas, como el consistorio barcelonés. El presidente de ERC ha insistido en que PSC y los comunes impidieron la investidura de Maragall hace cuatro años: «No es bueno poner la alcaldía en manos de quienes pactaron con la extrema derecha e impidieron que la ciudad tuviera un alcalde republicano como Ernest Maragall».

Y todo esto mientras la Junta electoral tiene que pronunciarse hoy sobre el recuento del pasado domingo. Los resultados provisionales de las elecciones municipales de Barcelona nos dejan un dato sorprendente en lo que se refiere a los votos nulos. La cifra se ha disparado con 6.402 votos nulos en toda la ciudad (en comparación a los 2.012 que se produjeron en los resultados provisionales de 2019, que finalmente fueron 1.540 con el recuento definitivo). Y concretamente existen seis secciones censales que superan el 4 % de votos nulos respecto al total de votos. Curiosamente todas situadas allí mismo: en la frontera entre los barrios del Clot y Sant Martí de Provençals. En estas seis secciones censales de la ciudad, se observa siete votos nulos en las últimas elecciones municipales, 219 en estos comicios. En la sección 108 de Sant Martí de Provençals (una de las dos donde gana el PP en Barcelona), los resultados del Ministerio del Interior contabilizan un 7,72% de votos nulos y, en la sección 109, un 5,54%, cuando la media en la capital catalana es del 0,95%.