Opinión

Concentración de jueces y fiscales

El miércoles hay convocada una concentración de jueces y fiscales para protestar por la Reforma del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal y del acceso a la Carrera Judicial y Fiscal

MADRID.-Jueces y fiscales convocan un paro el miércoles en rechazo a las reformas anunciadas por el Gobierno
Jueces y fiscales convocan un paro el miércoles en rechazo a las reformas anunciadas por el GobiernoEuropa Press

El próximo miércoles día 11, a las 12 horas, en la puerta de Ciudad de la Justicia, hay convocada una concentración de jueces y fiscales para mostrar su protesta por la Reforma del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal y del acceso a la Carrera Judicial y Fiscal. Yo voy a ir para dar mi apoyo aunque no sea ni Juez ni Fiscal porque he sabido que los abogados también podemos y yo diría debemos acudir.

Verán, los jueces y los fiscales acceden a su profesión por una oposición abierta, es decir, pública, lo que garantiza la igualdad de oportunidades. ¿Es un sistema perfecto? Pues no, pero pasa como con la democracia, que es el mejor comparado con el resto de opciones. Ellos, como nosotros los abogados, van aprendiendo con los años y la experiencia. Es frecuente un cierto encorsetamiento cuando empiezan la carrera profesional que suele atenuarse con el tiempo, como nos pasa a nosotros.

Los tres colectivos somos el elemento nuclear del mundo de la justicia. Los abogados no hacemos oposiciones, aunque nuestra carrera es una oposición continua, porque el prestigio se gana con los años y con mala suerte se pierde en un solo caso.

El cliente puede escoger abogado, pero el investigado no puede escoger juez o fiscal (hasta ahí podríamos llegar). Eso es una garantía para el investigado o encausado. Yo, como abogado, quiero delante mío a los mejores jueces y a los mejores fiscales, por eso a mí como abogado me mosquea que se pretenda la entrada de nuevos fiscales por la puerta de atrás, es decir, sin oposición abierta sino con una valoración de criterios subjetivos.

Si a eso le añaden que la reforma propuesta, no sólo huele a un cierto control de acceso a la carrera por parte del Poder Ejecutivo, concentra más facultades en el Fiscal General del Estado, desactiva el Consejo Fiscal -que es el órgano más representativo de la carrera-, manipula la Junta de Fiscales de Sala, es decir, de fiscales del Tribunal Supremo e introduce una opacidad en el reparto de determinados asuntos, comprenderán que como abogado vaya a apoyar la concentración.

En fin, que servidor con años de toga a sus espaldas y varias reformas vividas en el ámbito de la justicia, se huele que esto es una intolerable intromisión de clase política que parece tener alergia a la separación de poderes. En estrados ellos y nosotros lo hacemos lo mejor que podemos, pero resulta extraño algo tan surrealista como que el Fiscal General del Estado esté como investigado por algo y no dimita mientras, por ejemplo, a clientes míos que han salido en noticias de Prensa por declarar como investigados, los cómplices de los bancos obliguen a estos a cerrarles todos los créditos (de esto no tienen la culpa jueces y fiscales pero es la realidad).

Vaya, que voy y el 11 me solidarizo con ellos, por el Estado de Derecho, por mi profesión y para que se preserven las garantías de mis clientes.