Esta es la única provincia de Cataluña en la que no hay centros de El Corte Inglés

El Corte Inglés, los grandes almacenes abiertos a raíz de una pequeña sastrería en la calle Preciados de Madrid, tiene una importante implantación en Cataluña y especialmente en la ciudad de Barcelona. Este 2023 se cumplirán 61 años de la apertura del primer centro, el de plaza de Catalunya, en pleno corazón de la ciudad e inaugurado por el director general del grupo, el mítico empresario asturiano Ramón Areces, en otoño de 1962.

Tras ampliar el edifico al adquirir el bloque contiguo en la ronda Sant Pere cuatro años después, en 1966, llegó otro de los buques insignia de la compañía: el centro de la avenida Diagonal a la altura de Maria Cristina, en 1974.

Luego y ya dos décadas después, el grupo abrió otro en el centro de Barcelona, el de Portal de l'Àngel -a escasos metros de plaza de Catalunya- en 1998, aunque en otoño del año pasado saltó la noticia tras conocerse que lo compró la "joint venture" Redevco Iberian Ventures, propietaria del mercado de San Miguel, en Madrid. De momento sigue funcionando.

El último fue en Sant Andreu. En concreto, Can Dragó abrió en 2005 y tiene más de 18.000 metros cuadrados de superficie comercial, está especializado en moda, ocio y alimentación. Por el camino, el grupo ha prescindido del establecimiento ubicado en medio de la Diagonal, el de Francesc Macià, cerrado hace dos años.

¿Y fuera de Barcelona?

Fuera de Barcelona pero aún en el área metropolitana hay dos centros de El Corte Inglés, uno en Sabadell (Vallès Occidental) y otro en Cornellà de Llobregat (Baix Llobregat). Ambos se encuentran a escasos kilómetros de la capital catalana, aunque se han convertido en imanes para los catalanes del cinturón barcelonés que no quieren desplazarse hasta el centro. El de Sabadell abrió en 1991, mientras que el de Cornellà levantó la persiana en 1999.

En dos provincias más

Más allá de Barcelona y su área metropolitana, en Cataluña hay otros dos centros del grupo en dos provincias distintas: Girona y Tarragona. El primero, ubicado en la misma capital gerundense, es uno de los más antiguos ya que se inauguró en 1988, mucho antes que los anteriores mencionados.

Por contra, el de Tarragona, ubicado en una céntrica zona de la ciudad, es la última apuesta en Cataluña, puesta en marcha en 2010, con una superficie construida de más de 100.000 metros cuadrados.

Por tanto, Lleida es la única provincia catalana sin ningún centro de El Corte Inglés. Tampoco hay en la zona del Pirineo, enclave turístico por excelencia por las pistas de esquí y el turismo de montaña.