Avance médico

Describen un nuevo marcador para pronosticar la evolución de los pacientes con Alzheimer y otras demencias

El deterioro de la barrera hematoencefálica podría servir para identificar a aquellos pacientes en los que la enfermedad va a tener una progresión más rápida

Cerca de 12.000 españoles «heredan» el alzhéimer
Cerca de 12.000 españoles «heredan» el alzhéimerlarazon

Una investigación del Hospital del Mar Research Institute, junto con el BarcelonaBetaBrain Research Center, ha permitido identificar un marcador que podría ser útil a la hora de predecir qué pacientes con Alzhéimer u otro tipo de demencias experimentarán una evolución más rápida de la enfermedad y, en concreto, se trata del grado de deterioro de la barrera hematoencefálica, que regula los intercambios entre la sangre y el cerebro, al mismo tiempo que lo protege de posibles agresiones e infecciones. Dicho deterioro va asociado a un aumento de la permeabilidad de la barrera.

Sobre la trascendencia de este trabajo, cabe señalar que, por ahora, si bien existían ya buenos marcadores para el diagnóstico del Alzheimer, no se disponía de marcadores que permitan prever cómo será la evolución de los pacientes con esta enfermedad u otras demencias.

Para llevar a cabo este estudio se ha hecho un seguimiento durante cuatro años a más de 300 pacientes de la cohorte BIODEGMAR del Hospital del Mar, los cuales habían sido diagnosticados de deterioro cognitivo leve o demencia causadas por diferentes enfermedades neurodegenerativas, como Alzheimer o enfermedad cerebrovascular. Con el fin de comprobar su evolución, se valoraban los datos extraídos de una punción lumbar, así como de una resonancia magnética y una valoración neuropsicológica.

A más albúmina, más evolución

Los resultados de dicha investigación apuntan que en aquellos pacientes en los que, en la punción lumbar, tenían niveles más altos de albúmina en el líquido cefalorraquídeo respecto a los niveles en sangre, lo cual indica que hay un aumento de la permeabilidad por un deterioro de la función protectora de la barrera hematoencefálica, la evolución de la enfermedad es más rápida. En concreto, en la investigación se vio que el riesgo de unan progresión acelerada de la enfermedad crece un 8% por cada 10% de incremento de albúmina en el líquido cefalorraquídeo.

Sobre los factores que participan en el deterioro de la barrera hematoencefálica y, por lo tanto, en la disminución de su capacidad de proteger el cerebro, los investigadores destacan el ser hombre, los factores de riesgo cardiovascular, sobre todo la diabetes, y la existencia de signos de lesión vascular, que se detectan mediante una resonancia magnética.

El daño vascular, clave

En definitiva, la hipótesis a la cual apunta este trabajo es que "el daño vascular provoca esta alteración de la permeabilidad, hecho que provoca una aceleración del deterioro cognitivo provocado por la enfermedad que provoca la demencia", tal y como señala el doctor Ángel Ois, último firmante del estudio, investigador del Hospital del Mar Research Institut y neurólogo del Hospital del Mar. Por lo tanto, este marcador parece eficaz a la hora de prever la evolución del Alzheimer y más por cuanto es relativamente simple comprobar los niveles de albúmina en el líquido cefalorraquídeo y en sangre, basta con una punción lumbar y una analítica, pero además este hallazgo invita también a incidir en los factores de protección cardiovascular, puesto que de esta manera es posible preservar la capacidad de protección de la barrera hematoencefálica, así como a investigar acerca de posibles tratamientos que permitan restablecerla para mejorar el pronóstico de los pacientes.

Tal y como lo resume Albert Puig-Pijoan, investigador del Hospital del Mar Research Institute y médico adjunto del Servicio de Neurología del Hospital del Mar, "la preservación de la barrera hematoencefálica, con un muy buen control de los factores de riesgo cardiovascular o, eventualmente, con terapias que vayan dirigidas a restaurar la barrera, restablecer sus funciones o bien evitar su degradación, puede tener un papel importante en el tratamiento, no solo del Alzheimer, sino del deterioro cognitivo en general".