ERC y Junts aspiran a una "condonación total" de la deuda de Cataluña

Apenas cuatro días después de que Esquerra pactara la quita de un 20% de la deuda de Cataluña con el PSOE –alrededor de 15.0000 millones– republicanos y posconvergentes dejaron claro ayer que su aspiración final es la condonación total de los 73.000 millones de euros que la comunidad adeuda al Estado por la recepción de fondos públicos a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Y lo hicieron al registrar en el Parlament las conclusiones conjuntas de ambos partidos en la denominada Comisión de Estudio sobre la Deuda Histórica Catalana.

En el documento, Junts y ERC hablan de «un mínimo de reparaciones» mientras Cataluña «continúe dentro del Estado español», según citan textualmente, y dejan claro que la primera «es la cancelación de la deuda pública de la Generalitat en manos del Estado para reducir parcialmente la deuda histórica. La condonación de la totalidad del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) supone más de 73.000 millones de euros», señalan.

En concreto, ambas formaciones cifran en 456.000 millones de euros la «deuda histórica del Estado con Cataluña»: 50.900 millones de déficit en materia de infraestructuras; 375.000 millones en partidas sociales y 30.000 millones en pensiones entre 1982 y 2022. Y piden la condonación total de los 73.000 millones de euros del FLA como «mecanismo de reparación».

De hecho, republicanos y posconvergentes plantean también una ley de financiación singular, que propone una especie de concierto económico para Cataluña, con el que la Generalitat recaudaría todos los impuestos, y un cupo con el que se fijaría una cuota que pagaría Cataluña al Estado. En materia de pensiones, Junts y ERC plantean impulsar un sistema propio y crear la Agencia de Seguridad Social Catalana así como una compensación por «infrafinanciación estructural» en el ámbito de la sanidad.

Un documento con el que ambos partidos dejan claras sus pretensiones finales en materia económica pese a no formar parte de las negociaciones de ahora con el PSOE. Eso sí, su registro en la Cámara coincide con el cuantioso pacto arrancado por ERC al PSOE, con los 15.000 millones de la deuda y el traspaso de Cercanías como principal botín independentista.