ERC y Sumar se enredan por la mesa de diálogo y la consulta

ERC y Sumar, la plataforma de Yolanda Díaz que cuenta con el apoyo explícito de Ada Colau, llevan días enredados con la mesa de diálogo y la consulta, dos temas que los demás de partidos –incluido Junts– han sacado de la agenda política para este 23J.

Ante el ninguneo del resto de formaciones, los morados resucitaron el debate del referéndum pactado al inicio de la campaña para frenar las críticas de los republicanos. Y ahora lo vuelven a agitar pidiendo que se amplíe y que en la hipotética consulta se puedan votar cuestiones sobre infraestructuras o temas sectoriales, algo que Esquerra entiende como una rebaja y no acepta de ninguna manera.

«Tenemos que ir mucho más allá de las relaciones de Cataluña y España», aseguró ayer la candidata de Sumar en Barcelona, Aina Vidal, quien defendió que los catalanes puedan votar sobre cuestiones como la financiación, el traspaso de Cercanías y la gestión el aeropuerto de Barcelona.

En una rueda de prensa en la ACN, Vidal dijo que lo que plantea la Generalitat en la mesa de diálogo «debe ser más ambicioso y se debe poder hablar de mejora de la financiación, de competencias y de la gestión aeroportuaria», con el objetivo de que los catalanes voten después el acuerdo que se alcance. «No deja de ser un nuevo pacto territorial que deberá ser avalado por los catalanes», añadió la candidata.

«La mesa de negociación es para abordar el conflicto político entre Cataluña y España». «Evidentemente estamos abiertos, pero no en la mesa de negociación», replicó ayer la número dos de ERC, Teresa Jordà, desdeñando la propuesta de los morados.

«Sumar, este artefacto, este invento de una supuesta izquierda española, que nos creíamos que ponía por delante el interés o la voluntad de los pueblos a través de un referéndum, ha desaparecido. Cualquier propuesta que nos llegue de la líder de Sumar la ponemos en entredicho», abundó ayer sobre la propuesta de Yolanda Díaz de votar un nuevo acuerdo político en 2024 hecha en una entrevista en «La Vanguardia» y ampliada después por la mencionada Aina Vidal.

De hecho, la campaña ha evidenciado las maltrechas relaciones entre Sumar y ERC y la escalada de tensión entre ambos partidos tras un severo intercambio de críticas. «Sumar es restar en el Estado. Somos nosotros los que siempre estamos en defensa de Cataluña. Es ERC quien ha negociado completamente solo, se ha roto las piernas, ha bajado al barro, se ha arremangado y ha hecho sentar al Estado a una mesa», aseguró Gabriel Rufián sobre la posición de la vicepresidenta con Cataluña. «A Yolanda Díaz la entiendo cuando habla de todo menos cuando habla de Cataluña. El ejemplo es el referéndum de Schrodinger. Es un espacio político que ha vendido a su propia gente, el ejemplo es Irene Montero», abundó el republicano dejando claro sus preferencias y usando a Podemos para desgastar a Sumar.

Desde el entorno de Ada Colau también cargan contra los republicanos, en especial contra el propio Rufián por sus críticas a la cabeza de cartel de la plataforma para este 23J. Un intercambio de golpes inaudito a las puertas de las elecciones y con las dos fuerzas a la baja en las encuestas.

Además, ERC está en el punto de mira de parte del independentismo por su hoja de ruta. La CUP se sumó ayer al argumento de Junts, cargó contra su estrategia y dijo que el PSOE ha «tomado el pelo» a los republicanos con respecto al conflicto catalán «en más de una ocasión». A su juicio, los socialistas no articulan «un diálogo sincero» en la mesa de diálogo porque «no buscan resolver nada», sino simplemente «desmovilizar» al independentismo.