Patronal catalana

Malestar en Foment del Treball con el plan de Junts de sancionar a empresas que no vuelvan a Cataluña

La patronal catalana rechaza que el retorno de las empresas catalanas que cambiaron su sede social en 2017 "se base en sanciones"

Economía.- Foment del Treball rechaza que el retorno de las empresas a Cataluña "deba basarse en sanciones"
Economía.- Foment del Treball rechaza que el retorno de las empresas a Cataluña "deba basarse en sanciones"Europa Press

Malestar profundo en la patronal catalana Foment del Treball tras conocer la propuesta de Junts de sancionar a las empresas que se marcharon tras el referéndum ilegal del 1-O y no regresen a Cataluña. La organización que preside Josep Sánchez Llibre rechaza que el regreso de las compañías deba «basarse en sanciones o incentivos» en función de si vuelven o no, tal y como propone Junts. «No es una política económica aceptable», señala el comunicado emitido por Foment.

El planteamiento de Foment ha sido siempre tratar de crear «estabilidad jurídica» para que las empresas vuelvan a Cataluña. «Foment del Treball mantiene la tesis de que la normalidad institucional y la creación de un clima económico favorable son el contexto necesario para favorecer el retorno de aquellas empresas que se marcharon si es que lo consideran necesario», señala la patronal, rechazando otras vías, como las sanciones para las empresas que no quieran regresar o los incentivos fiscales para aquellas que sí decidan retornar a Cataluña.

La propuesta lanzada por Junts ha generado mucho malestar en la patronal, aunque, a lo largo de la jornada, hubo contactos para tratar de reconducir la situación y frenar la propuesta de Junts.

En el mundo empresarial catalán hay quien define a Junts como «trabucaires», en referencia a que van lanzando ideas y propuestas a diestro y siniestro, sin una orientación demasiado clara. En esta ocasión, con la propuesta para sancionar e incentivar a empresas es lo que ha ocurrido: de la noche a la mañana, los posconvergentes han pasado de denunciar que los decretos ponían en peligro la amnistía para justificar su voto en contra a abrirse a salvar las iniciativas del Gobierno a cambio de un plan para que vuelvan las empresas.