Tensión

Los Mossos evitarán la intervención de la empresa Desokupa en la Bonanova (Barcelona) para evitar una batalla campal

La Policía Autonómica incrementa su presencia en la zona para evitar más tensión entre vecinos y "okupas"

Este pasado fin de semana fueron días y noches de tensión en el barrio de la Bonanova en Barcelona. Hubo quejas vecinales e intervenciones policiales. Ocultos con cascos y pasamontañas y armados con palos y hachas, los «okupas» volvieron a atemorizar a los vecinos, muy cansados y hartos de la situación.

Por ello, los Mossos anunciaron ayer que aumentaron su presencia en la plaza Bonanova, para aplacar los incidentes de orden público provocados en las últimas semanas por unos 150 «okupas» que viven en los inmuebles El Kubo y la Ruïna –ante la iglesia de la plaza– contra algunos vecinos.

Fuentes policiales explicaron que el objetivo del incremento de efectivos policiales pretende garantizar la seguridad de los vecinos de la zona. No dejarán que la empresa Desokupa intervebga el jueves, para evitar una batalla campal.

«Nos preocupa la degradación de la convivencia en los últimos días en relación a los locales ocupados en la plaza Bonanova», añadieron, y detallaron que desde el domingo se mantiene la presencia de agentes uniformados y no uniformados.

Además, explicaron que hoy martes y jueves están previstas dos manifestaciones en la zona con personas a favor de los dos edificios ocupados y personas en contra.

Las mismas fuentes negaron que esta semana los Mossos desalojen los edificios, y reiteraron que la presencia policial servirá para garantizar la seguridad y el derecho a la manifestación.

Sin embargo, las manifestaciones previstas para esta semana «no están formalizadas ni comunicadas a las autoridades pertinentes» por lo que ya se derivarían las responsabilidades administrativas pertinentes a los responsables si finalmente se hacen.

«Por redes sociales se hizo un llamamiento colectivo a manifestarse este jueves y a protestar ante la Ruïna y el Kubo. Ante estos hechos y, con los antecedentes de estas semanas, hemos activado el nivel 3 (de 4) para evitar que los manifestantes contrarios se encuentren», dijeron.

Detallaron que activarán a agentes de Seguridad Ciudadana, de la Brigada Móvil (Brimo) y del Área Regional de Recursos Operativos (Arro), además de helicópteros para controlar la zona.

Los agentes evitarán que grupos contrapuestos entren en la plaza: «Colocaremos a las manifestaciones contrarias en dos extremos contrarios de la plaza para evitar tensión por contacto o por lanzamiento de objetos».

Añadieron que las personas que viven en los edificios ocupados tomaron «medidas de fortificación con cemento para dificultar el acceso y tienen cierto arsenal de elementos de lanzamiento», como extintores y palos.

En algún momento del fin de semana, los vecinos que pasaban por la zona tuvieron que huir rápidamente para evitar ser atacados. Los testigos de los hechos fueron los encargados de alertar a los Mossos. Varios furgones de la policía catalana se presentaron delante de los edificios «okupados», y cortaron el paso de las vías más cercanas.

La pasada semana también se vivió algún momento de tensión mientras los Mossos contenían dos manifestaciones opuestas, entre contrarios y defensores de los okupas.

A la espera de los desalojos judiciales, algunos vecinos veían la solución en el anuncio de la empresa Desokupa de intervenir el próximo jueves con un gran dispositivo. Los vecinos tienen previstas más movilizaciones, con la esperanza de que esta situación llegue a su fin y vuelva a reinar la calma en el barrio.