Orriols acusa a Illa de colocar un centro de menores inmigrantes en Ripoll para castigar a los electores de Aliança: "¿Por qué no los mete en su casa?"

En cada miércoles que hay sesión de control, la líder de Aliança Catalana y alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols, y el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, se enzarzan con la inmigración, la inseguridad, el islamismo o los "menas". Esta vez, Orriols ha acusado al Ejecutivo catalán de haber colocado en su municipio un centro de menores inmigrantes no acompañados “sin avisar, sin preguntar, sin escuchar a los ripolleses”, y ha sugerido que la medida obedece a un “castigo” por haberla votado a ella en las elecciones municipales.

Ha denunciado que los menores residen “completamente solos”, y ha cargado duramente contra lo que ha calificado como un sistema corrupto que busca “colocar inmigrantes ilegales con pisos, albergues y hoteles propiedad de personas y fundaciones afines al régimen", en referencia a uno de los muchos escándalos de la DGAIA. “La corrupción es tan bestia, el escándalo es tan mayúsculo, que el 3% de hace unos años empieza a parecer chatarra. Tantas lecciones de humanidad, de moralidad, de decirme racista, extrema derecha, fascista y nazi, y resulta que quienes lo decían no eran buenas personas, no, es que veían peligrar un negocio”, ha seguido refiriéndose también al escándalo.

Orriols, además, ha cuestionado si “es normal” que los contribuyentes ripolleses y catalanes tengan que pagar el alojamiento, la manutención y “la paguita” de estos menores, mientras, según ha dicho, sus padres no abonan “ni cinco”. Ha ido más allá y ha acusado al líder del Govern de haber ubicado el piso en Ripoll como forma de represalia contra los electores que votaron por Aliança Catalana. “¿Por qué en Ripoll, señor Illa?”, ha preguntado. “¿Por qué no los aloja en su casa, en su barrio o en su ciudad si tanto le gustan? ¿Qué han hecho mal los ripolleses? ¿Votarme?”, ha añadido.

Además, de nuevo en una nueva referencia al escándalo de la DGAIA, ha preguntado a Illa qué harán para, en sus palabras, tapar tanta desidia y corrupción: “¿Me los enviará a todos hacia Ripoll ahora de colonias? ¿Tengo que colgar el cartel de ‘todo lleno’ en la entrada del pueblo para que capten el mensaje?”.

Por su parte, la respuesta de Salvador Illa ha sido firme. El president ha rechazado con contundencia lo que ha llamado “tonterías” e “insinuaciones”, y ha advertido a la dirigente de Aliança Catalana que, si tiene indicios de irregularidades, acuda a los tribunales. “Si no, tal vez iré yo”, ha advertido. Illa ha defendido que Cataluña, “como sociedad cohesionada y avanzada”, acoge a los menores no acompañados que le corresponden, también en Ripoll: “No haremos una excepción”.

Orriols, lejos de rebajar el tono en su réplica, ha acusado a Illa de preocuparse más por “el negocio” que por el bienestar de los menores: “De buen samaritano, usted solo tiene el nombre”. Illa ha concluido su intervención reivindicando una sociedad que “confronta e intenta resolver los problemas” frente a quienes, como ha dicho en alusión a Orriols, hacen “política incluso con la miseria de las personas”.